Con la espalda y la cabeza abiertas terminó un carnicero a consecuencia de una riña en la que su nieto lo agredió mientras ingerían bebidas alcohólicas con otros familiares. A raíz de las sobrecopas, recordaron viejas rencillas, lo que originó los dimes y diretes que se salieron de control.
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Los hechos ocurrieron la tarde-noche de ayer en la calle 37 por 24 del barrio Pablo García en la ciudad Bécal, donde vecinos reportaron los hechos al escuchar los fuertes gritos de angustia y desesperación de los familiares.
Al lugar llegaron paramédicos del SAMU, quienes atendieron al lesionado, quien tenía heridas profundas y sangrantes. Sin embargo, se negó a ser trasladado al hospital integral IMSS-Bienestar de Calkiní para su atención médica, por lo que fue bajado de la ambulancia para evitar que este sujeto se aventurara durante el traslado, ya que estaba bien alcoholizado.
Más tarde, llegaron elementos de la policía municipal para verificar el reporte. Sin embargo, los lesionados ya habían ingresado en sus domicilios. Los paramédicos del SAMU recomendaron al paciente que acudiera a un médico para que le suturaran la herida debido a que eran profundas; de lo contrario, seguirían sangrando.
Los elementos dieron sus rondines por la cuadra, y al no dar con los lesionados, decidieron retirarse del lugar. Así mismo, los paramédicos se retiraron, no sin antes hacer que firmaran un documento donde consta que hicieron presencia y atendieron al lesionado, quien se negó a ser trasladado al hospital comunitario para su mejor atención médica.
JGH
