Cultura

'Abstracción del límite', exposición de la artista Sofía Kalife

La artista Sofía Kalife estará presentando sus obras en el centro artístico La Cúpula hasta el viernes

Ir más allá de lo pictórico, del lienzo y de la bidimensionalidad implica, como dice la artista Sofía Kalife, diluir fronteras mientras cobran forma otros cuerpos.

Abstracción del límite, una exposición que interpreta la materia a partir de la materia misma, permanecerá hasta este viernes en el centro artístico La Cúpula. La muestra “busca dar forma a la experiencia corporal de la materia en el espacio real o imaginado, el cuerpo metonímico, como soporte material y como energía creativa, como fenómeno, espacio social y lugar de violencia”, según el texto que acompaña las obras entre las paredes de la calle 54 núm. 407, entre la 41 y la 43 del Centro meridano.

Noticia destacada

Diseña la arquitectura de las letras

Noticia destacada

Cuidan el cuerpo con la naturaleza

“La corporalidad hace referencia a cómo los límites entre lo plano de lo pictórico y lo tridimensional de la escultura borra la franja entre ellas. Lo veo como algo poético: cómo van tomando forma estos cuerpos que están hechos de materiales. En este caso, es la pintura”, dice a POR ESTO! Sofía Kalife.

Acompañó el diálogo la directora del centro artístico, Diana Castillo. “Intentamos que el espacio sea tan neutro como sea posible, para que las obras de Sofía estuvieran en una especie de lienzo en blanco”. El curador, Guillermo Olguín, artista oaxaqueño, modificó el espacio de la galería para “permitir al visitante ir dialogando y descubriendo la obra de Sofía. Las personas que entran a las tres salas se han sorprendido mucho en cada una de ellas”. El curador hizo que la última sección quedara en penumbra, salvo por la escultura que “se convierte en objeto precioso, total protagonista de la sala. El capelo de cristal suma a esta propuesta del curador”.

Noticia destacada

La originalidad nunca ha existido

Síguenos en Google News y recibe la mejor información

Un torso se deshoja entre costras de pintura en la última sala. “Algunos cuadros, como la escultura, incorporan pintura que iba encontrando en el suelo de la calle, que formaba parte de las fachadas de los edificios en las calles del Centro”, revela Sofía.

“Esos espacios los recorremos muchas personas. El espacio es de todos”, asevera la artista. “Vamos habitando estos cuerpos y los vamos encontrando, sin permanecer en estas calles fijamente. Tomar estas piezas que habitan en las avenidas que transcurrimos también es como llevar esos cuerpos a un pequeño marco o lienzo, un cambio de superficie. El espacio toma forma”.

Diana asiente. Ella ha recibido a los visitantes de Abstracción del límite: “fuera de la belleza estética impresionante de las piezas, éstas generan nostalgia. Diría que esto pasa incluso más en la gente que es de aquí, de Mérida, que en la que viene de fuera. De alguna manera, sienten suya la pieza, como si en esos trozos de pared hubiese algún elemento que les pertenece. Puedo decir que yo misma siento eso también”.

En el texto de sala, Sofía repara en la violencia. “En todo momento violentamos el cuerpo. Siento que, de alguna forma, también están involucradas las cosas que lo afectan. Hago referencia al cuerpo social, a este espacio que, como dije, recorremos todos día con día, y cómo todos estos tráficos van deteriorando el mismo espacio del cuerpo. Las fachadas me sirven para centrar un nuevo proceso creativo a partir de un deterioro. En algunos cuadros, como el díptico del Tren Maya, o los que están frente a ellos, hacen referencia a los espacios naturales, a cómo el humano se adjudica todos estos espacios y los violenta para generar otras economías y tránsitos. Eso es querer dominar el espacio que pertenece a todos”.

En estos trabajos, el color es memoria. “Abandoné la forma definida y me basé en el color”, dice la artista. “La relación de los colores nos evoca a la memoria recuerdos que no particularmente están presentes en el lienzo. Una persona puede ver algo que otra no llegará a contemplar”

Las geometrías se adaptan al espacio. “La espontaneidad es la que dirigió el ser de cada pieza. Los formatos que resultaron, casualmente, habían llegado a mí. Por ejemplo, los lienzos redondos. Con los materiales que tenía a la mano, resultaban en un ciclo, que hacen referencia a los títulos de mis pinturas. La intención es nunca tratar de controlar la obra para que ésta tome forma”.

Abstracción del límite espera a su público hasta el viernes, sin previa cita y sin costo de admisión, hasta el viernes, de 17:00 a 20:00 horas.