Por la ruta fácil
Por Sergio Orozco
El dueto norteamericano conformado por Alec Adamson y Luke Jacob Gamble, quienes actualmente resguardan en es mismo orden el puesto 527 y 683 de la ATP, liquidó en la gran final de la etapa 25 del ITF World Tennis Tour, disputada en las instalaciones del Cancún Tennis Academy, a la pareja argentina integrada por Maximiliano Estévez y Mariano Kestelboim, a quienes doblegaron en parciales de 6-2 y 6-1, resultado con en el que la pareja estadounidense conquistó el título de campeonato de la modalidad Dobles Varonil.
Fue así que el número 367 y 398 de la ATP, los argentinos Maximiliano Estévez y Mariano Kestelboim, respectivamente, terminaron por ser los finalistas de esta última batalla, después de haber derrotado en la ronda de semifinales, al dueto conformado por el mexicano Daniel Garza y el boliviano Alejandro Mendoza, quienes ocuparon en ese mismo orden los puestos mil 313 y 803 de es misma asociación, toda vez que los dos sets que se jugaron, culminaron en su contra 7-6 y 6-3.
Cabe señalar que en esta ocasión contendieron 16 parejas, de donde surgió el dueto norteamericano que se adjudicó el título de campeonato de este serial, no sin antes vencer en el duelo de semifinales al binomio integrado por el irlandés Julian Bradley y el estadounidense Justin Butsch, los números 319 y 427 de la ATP, los cuales extendieron su agonía a un tercer parcial, después de haber ganado el primer episodio 3-6, por lo que los compatriotas de este segundo tenista tuvieron que igualar las cosas en el segundo capítulo que culminó a su favor 6-4.
Debido a esto se disputó en el tercer parcial una aguerrida muerte súbita, toda vez que la pareja compuesta por el irlandés Julian Bradley y el estadounidense Justin Butsch cayó abatida 10-6, pues los últimos puntos se los repartieron a cuentagotas en una toma y daca.
Por lo que toca la batalla final de la modalidad Dobles Varonil, ésta fue dominada desde un principio por el dueto norteamericano integrado por Alec Adamson y Luke Jacob Gamble, situación que se reflejó en los números, pues al final consiguieron romper en 4 ocasiones el saque de sus adversarios, además de que obtuvieron una efectividad del 70 por ciento en sus primeros servicios, sin cometer ninguna falta.