Juan Diego Casanova Medina
Ni Linda Fruhvirtova, ni Nahimana, ni Yepifanova, ni Montgomery. La estrella del Mundial Juvenil Yucatán de Tenis, presentado por Bepensa es Victoria Jiménez Kasintseva, de Andorra, quien ganó el título del torneo de Grado A, el primero en su incipiente carrera en este deporte, la que va en ascenso de forma vertiginosa.
Con su triunfo en la final femenil por 7-6 (8) y 6-2 sobre la canadiense Melodie Collard, novena sembrada, escribió su nombre y el de su país con letras de oro como la primera campeona en obtener la corona. Victoria puso a Yucatán a sus pies.
En la rama varonil, el argentino Thiago Agustín Tirante impuso su experiencia y condición de primer sembrado para obtener una sufrida y trabajada victoria sobre el francés Arthur Casaux, por 3-6, 7-6 (5) y 6-3, a quien le repitió la dosis, y conquistó la corona en la final varonil.
De esta forma, el tenista sudamericano se despidió de los torneos Juniors de la Federación Internacional de Tenis (ITF, por sus siglas en inglés) con el doblete, al ganar los títulos de singles y dobles.
Un combativo Thiago Tirante superó los fuertes disparos colocados con precisión y que encontraron respuesta fulminante del argentino. Pero también otro factor que fue decisivo, fue la motivación que le dio al nuevo campeón, el recuerdo de su abuelita fallecida hace unos días, lo que lo emocionó al grado que no pudo contener las lágrimas al consumarse su triunfo.
Cobijada con el apoyo del público que abarrotó la cancha Estadio “Lorenzo Molina Casares”, del Club Campestre, la jugadora europea exhibió una férrea fuerza mental para remontar una desventaja de tres puntos en la muerte súbita del primer set que le permitió emparejar el marcador 6-6.
El duelo siguió parejo hasta el punto 16 y la tenista de 14 años de edad que los cumplió en agosto pasado, inclinó la balanza a su favor, asestando el demoledor golpe al ganar los siguientes dos puntos con los que tumbó a la canadiense, que se desmoronó en el segundo parcial.
Con la corona en sus sienes y los 500 puntos que se agenció, Victoria Jiménez Kasintseva se ubicará en las clasificaciones mensuales de Juniors de la Federación Internacional de Tenis (ITF, por sus siglas en inglés) en el casillero 25, dando un espectacular salto de calidad desde la posición 94.
Y todavía quedan torneos importantes antes de finalizar el 2019. El Eddie Herr, de Grado 1 y el Orange Bowl, de Grado A, ambos en el estado de Florida, en los Estados Unidos, por lo que esta jovencita con un futuro brillante en el tenis femenil, puede dar la sorpresa e instalarse entre las mejores jugadores del planeta. Asombroso.
Desde el año pasado, Victoria Jiménez inició su participación en diferentes torneos, desde el de menor categoría hasta el máximo escaparate del tenis universal como es el Grado A.
Exitosa cosecha
Los torneos que ha ganado Victoria son el de Cataluña, de Grado 5, el de Belgrado, de Grado 4 y obtuvo tres títulos seguidos en competencias de Grado 3: dos en Barcelona y una en Francia y ahora es la nueva reina en el torneo de Grado A en Yucatán.
Este año, ganó el Torneo Mutua de Madrid, en el que participan los mejores 16 tenistas en sus ramas, y par de años atrás, a los 12 años de edad, ganó la categoría Sub-13 en Roland Garros, en Francia.
En 41 partidos disputados hasta el momento, la adolescente acumula sólo 7 derrotas, la última de ellas, en el reciente torneo en Cancún, Quintana Roo, de Grado 1, en donde perdió en la primera ronda, después de aterrizar de un largo y cansado viaje desde España.
Como le dijo al cronista después del juego, tras eliminar a la rusa María Bondarenko, quinta clasificada, en cuartos de final: “si quieres ganar, tienes que luchar”, así se expresó después de la batalla contra Melodie Collard.
Su padre Joan Jiménez, es su entrenador y su madre Yulia Kasintseva los acompaña a los torneos. Recuerde su nombre: Victoria Jiménez Kasintseva, porque pronto dará de qué hablar en el tenis.
“Una raya más para el tigre”
Participará en el Open Junior en Australia, el primer Grand Slam del año, torneo al que viajarán el próximo 15 de enero.
Después de los trepidantes juegos de la final, se efectuó la ceremonia de premiación que presidió Jorge Haro Giffenig, director general del Mundial Juvenil Yucatán FMT, quien agradeció al comité organizador, a todos los que con su apoyo y confianza hicieron posible la realización de esta trigésima tercera edición.
Así es como concluye en nuestro Estado el torneo juvenil de Grado A, uno de los 10 mejores del mundo. Se apagaron las lámparas de las canchas del Club Campestre y comenzarán ahora los preparativos para el siguiente en el 2020, un año más en la historia de este torneo.
Como diría Jorge Robleda Moguel, el precursor de este magno evento, “una raya más para el tigre”.