EAST RUTHERFORD, EU, 6 de septiembre (AP).- Estados Unidos se insinuó mejor al principio, pero el resultado fue el mismo: otra victoria de México.
Más efectivo, el Tri confirmó su superioridad en la gran rivalidad de la CONCACAF con una inobjetable victoria 3-0 la noche del viernes en Nueva Jersey.
Javier “Chicharito” Hernández abrió el marcador con un cabezazo en la primera parte, mientras que Erick Gutiérrez y Uriel Antuna sellaron la goleada en el último cuarto de hora.
Estados Unidos desperdició la oportunidad de maquillar el resultado con un descuento sobre el final con un penal, pero el arquero Jonathan Orozco le tapó el disparo a Josh Sargeant.
Dos meses después de consagrarse campeón de la Copa de Oro, con una victoria 1-0, los estadounidenses volvieron a ejercer la iniciativa en los primeros compases.
Tal y como ocurrió en aquella definición en Chicago, el equipo dirigido por el técnico argentino Gerardo Martino recuperó la manija. Pero no tuvo que esperar hasta el tramo final para facturar el gol.
Una buena jugada armada por el “Chicharito” Hernández fue culminada en gol a los 21 minutos por el mismo delantero que acaba de ser traspasado del West Ham inglés al Sevilla español. El goleador histórico de la selección llegó a las 52 conquistas al cabecear en soledad el centro de Jesús Corona, quien previamente había superado la marca de Sergiño Dest haciéndole un caño.
Frente a un desdibujado conjunto local, Gutiérrez capitalizó un grosero error en la salida y anotó su primer gol con la selección mexicana a los 78. Lo hizo con su primer toque de balón tras ingresar por Andrés Guardado.
Cuatro minutos después, Antuna puso cifras definitivas en un contragolpe y quedó con cinco goles en siete partidos con el Tri.
Fue la victoria más abultada de México sobre su vecino desde el 5-0 que le endosó en la final de la Copa de Oro de 2009. También han ganado cuatro de sus últimos seis enfrentamientos.
México alteró casi por completo el once titular que venció a los estadounidenses en el duelo por el título del torneo continental. El central Héctor Moreno y el volante Andrés Guardado fueron los únicos que repitieron.
Orozco reemplazó a Guillermo Ochoa en el arco, Jesús Gallardo jugó de lateral derecho, Diego Reyes como central y Jorge Sánchez en el carril izquierdo. Héctor Herrera y Carlos Rodríguez completaron una línea de tres volantes, mientras que Corona, Roberto Alvarado y el Chicharito conformaron el trío de atacantes.
Jonathan Dos Santos, autor del gol en la final de la Copa de Oro, se quedó en el banquillo. Hirving Lozano, quien acaba de ser transferido al Nápoles italiano, también fue relegado en el banquillo pero ingresó a los 70 y se perdió un gol con un remate apenas desviado.
Dest hizo su debut como lateral izquierdo con Estados Unidos, uno de los seis cambios con respecto al once titular de la derrota en la Copa. Con apenas 18 años, Dest empieza a despuntar en el Ajax holandés pero recibió un baño de realidad en cuanto a quién domina entre las dos grandes potencias de la CONCACAF.
Estados Unidos, que se perdió el Mundial de Rusia 2018, trata de renovarse, dándole alas a sangre joven como Dest y Sargent.
México, en cambio, dispone de un amplio arsenal. ¿Cuán tanto? Pues el “Tata” Martino se dio el lujo de no usar a Raúl Jiménez, el jugador mexicano con el mejor presente: autor de ocho goles en el arranque de la temporada con el Wolverhampton de la Liga Premier inglesa.