Juan Diego Casanova MedinaIX (Continuación)
La pesca submarina presenta una complejidad en cuanto a las técnicas que desarrolla para capturar las especies señaladas en el reglamento de competencia, en una “cancha” diseñada en forma de rectángulo que tiene una extensión de 7 kilómetros de largo por 4 kilómetros de ancho.
Dependiendo de la zona geográfica, del país, de las especies, se utilizan diversas técnicas, informó Rafael Arévalo Erosa, vicepresidente de la Federación Mexicana de Actividades Subacuáticas. Pero también, agregó, los competidores más avanzados desarrollan sus propias técnicas que muchas veces son combinaciones de una u otra técnica así como la forma de utilizar el equipo de una u otra manera.
La pesca del agujero, la pesca de la espera, la pesca de espuma, la pesca a la caída, la pesca en azul, son algunas de las técnicas básicas que se desarrollan en el mundo de la pesca submarina.
Rommel Arévalo Erosa, integrante de la Selección de México, conformada por deportistas yucatecos, explicó la primera de ellas, la del agujero.
En ella, el competidor se apoya en una linterna y se utiliza un arpón pequeño, de 50 o 60 centímetros y se busca encontrar al pez dentro de los agujeros y cuevas que están debajo del agua.
Incluso, el buzo ingresa con todo su cuerpo dentro del agujero porque resulta que el pez está dentro del agujero, del agujero, se encuentra al fondo y hay que disparar con la ayuda de la linterna.
Lo complicado viene al momento de intentar salir, porque no hay facilidad para maniobrar y lo tiene que hacer desplazándose en “reversa”.
Muchas veces, mencionó, el pez se atora en las piedras, levanta el esquilón o espina dorsal o abre los “cachetes” y se “anclan” en la piedra, por lo que resulta difícil sacarlos, por lo que hay que aplicar mucha cuerda.
Por lo general, añadió, se tiene que salir a respirar, regresar y realizar un segundo tiro para rematarlo y poder sacarlo.
La pesca a la caída resulta interesante pero también tiene su grado de dificultad. Esta se realiza nadando en superficie, precisó, buscando la especie que se trata de cazar, lo que ocurre en algunas ocasiones cuando la distingues o cuando se logra ver la forma de su hábitat, a través de rocas, arena, o en determinadas plantas. Por lo general, se ubican en lugares bastantes profundos.
Una vez identificado, el competidor se deja caer 25 o 30 metros pero la complejidad radica en mantener muy balanceado el cuerpo, debido a que el tipo de especie resulta muy “arisca“, por lo que no puedes generar ningún movimiento cerca de él porque el pez se va a ir.
Si acaso, alguno leve, apuntó, apenas la punta de la aleta para corregir el rumbo y bajar derechito hacia el objetivo.
Rafael Arévalo comentó que cuando te encuentras cerca de la pieza, a veces llegas como “tullido” y como el descenso es en posición vertical, le tiras al pez en el lomo, la parte más angosta, porque no miras al pez de forma lateral sino en línea recta, lo que dificulta dar en el blanco.
Existe otra técnica súper emocionante que la pesca de espuma que se desarrolla en los países donde el mar pega con la montaña, no hay playa, está el acantilado y el choque de las olas con la pared genera espuma, lo que produce fotosíntesis y hay vida en la pared de la montaña, por lo que cuando sube la marea, los peces aprovechan para salir a comer.
Señaló que desde metros atrás tiene que hacer la bajada y por debajo del agua llegar hasta la pared de la montaña y luego mirar hacia arriba para poder tirar y cazar a los peces que están comiendo en la espuma.
Destacó que en el Campeonato Mundial que se efectuará en septiembre próximo en Italia, muy probablemente se desarrolle la pesca a la caída, a una gran profundidad, de tal forma que van a tener que pescar a una profundidad de 45 metros y también hay muchas posibilidades de competir en pesa de espuma.
Debido a que durante la celebración del Mundial, el mar quizá se encuentre tranquilo, dejó entrever la posibilidad de pescar a la orilla, muy pegado a la montaña, con aguas claras.
Por otra parte, destacó que la complejidad de la puntuación de las especies capturadas es que considera todo los criterios dentro de la pesca submarina, es decir, deja un rango de criterio muy precisos, entre los que se encuentra conocer la especie, el entorno para poder encontrarlo, el peso, el número de piezas, cumpliendo lo que te van pidiendo, de tal forma que todo está enfocado a que no cuente la suerte, a disminuir el factor suerte.
El directivo mencionó que hay otras competencias que contempla la Confederación Mundial de Actividades Subacuáticas (CMAS), como el de duplas y de clubes, pero siempre la limitante para asistir es el tema de los recursos económicos.
Ronald Linaldi Sánchez, presidente de la Asociación Yucateca de Actividades Subacuáticas, informó que en Yucatán se realizará de forma individual el campeonato estatal de pesca submarina, al igual que el campeonato nacional. Ambos eventos, añadió, serán clasificatorios para conformar la selección que representará a México en el Panamericano y en el Campeonato Mundial, en caso de obtener el boleto.
Rafael Arévalo Erosa subrayó que no existen premios económicos para los ganadores, por lo regular, la comunidad que desarrolla este deporte o lo practica son ciento por ciento apasionados, al grado que se vuelve un estilo de vida.
El único aliciente para competir, aseguró, es medir las capacidades de forma individual todas las veces y con otras personas del mundo.
“La motivación de una competencia de pesca submarina, no persigue un aliciente económico sino proponerse un reto personal para superar las capacidades propias y compartir con personas de otros lugares del planeta”, enfatizó.