Sin mantener la sana distancia como parte del protocolo sanitario ante el riesgo de volver a rojo en el Semáforo Epidemiológico Estatal, cientos de aficionados formaron largas filas la noche de este martes en las afueras del estadio Beto Ávila de Cancún en busca de ingresar al inmueble donde minutos más tarde se llevó a cabo la ceremonia inaugural de la Temporada 2021 de la Liga Mexicana de Béisbol para los Tigres de Quintana Roo.
Luego de 20 meses de ausencia debido a la pandemia que provocó la cancelación de la campaña pasada en la LMB, la afición regresó al estadio en medio de un operativo sanitario que generó el lento avance de la fila puesto que en la entrada principal se colocaron filtros sanitarios en los que se distribuyeron gel antibacterial, chequeo de temperatura y santificación.
La ceremonia de inauguración inició alrededor de las 19:45 horas con la pasarela de los jugadores del primer rival del equipo en la temporada, Piratas de Campeche, posteriormente salieron del dugout los elementos de los Tigres de Quintana Roo.
Asimismo se realizó la presentación de los directivos del club encabezados por el presidente ejecutivo, Fernando Valenzuela Burgos quien se hizo acompañar por Claudia Carolina Gil Centeno, en representación de personal del Instituto Mexicano del Seguro Social que está en la primera línea de batalla contra COVID-19, así como invitados especiales del 64o Batallón de Infantería y la 5a Región Naval.
Después de rendir honores a la bandera con la participación de la escolta de la Zona militar, inició del show de la mascota del equipo, Chacho con las luces apagadas del estadio, en donde también se realizó la presentación de la canción oficial de la Temporada 2021 para los Tigres de Quintana Roo, a cargo de Swing Latino.
El lanzamiento de la primera bola corrió a cuenta de Claudia Carolina Gil Centeno y con la serie de fuegos pirotécnicos la ceremonia de inauguración llegó a su final.
De esta manera, la larga espera terminó y se encendieron las candilejas del estadio para dar paso al primer juego de la serie inaugural en Cancún de los Tigres de Quintana Roo, enfrentando a los Piratas de Campeche.
Para ese momento, la afición había tomado sus asientos en el estadio con capacidad para 9,500 personas, sin hacer caso a las mínimas medidas sanitarias como mantener la sana distancia, y el uso del cubrebocas y es que este juego fue evidente el exceso en el cupo permitido en semáforo naranja de alrededor de 3 mil asistentes, ya que se pudo notar tres cuartos de estadio lleno.
MA