El abridor del Águila de Veracruz, David Reyes, se quedó a un strike de lanzar juego sin hit ni carrera, sin embargo, sí blanqueó a los Leones de Yucatán 2x0, en el tercer duelo de la serie disputado en el Parque “Kukulcán”.
El oriundo de los Mochis hizo una estupenda labor de 8.2 entradas, donde sólo permitió que se embasaran cuatro jugadores, tres por la vía del pasaporte y uno por error del parador en corto, poniéndose muy cerca de hacer historia.
En la antesala de la historia
Teniendo enfrente a José Juan Aguilar y buscando al out 27, ya con dos strikes, el J.J. conectó sencillo al central, rompiendo la magia, aunque Reyes en el siguiente bateador, Alex Liddi, terminó todo.
Los únicos que pisaron colchoneta fueron el mismo Alex Liddi con base por bola en la primera entrada; Art Charles por la misma vía en la segunda; José Juan Aguilar con error del paracorto en la séptima; aunque curiosamente ninguno pudo llegar a la intermedia, ya que el siguiente bateador conectó para una doble matanza.
En la novena, Norberto Obeso llegó a la inicial con pasaporte, pero José Juan Aguilar le rompió el encanto con el sencillo al central.
David se llevó el triunfo con labor monticular de nueve entradas, aceptando un sólo indiscutible, con 124 lanzamientos al plato, 78 de strike; la derrota fue a la cuenta del norteamericano Logan Ondrusek con labor de 6.1 episodios, aceptando las dos carreras y siete indiscutibles, con un pasaporte y seis ponches.
El celofán se rompió en el cuarto episodio, con 2 fuera, el cubano Yasiel Puig conectó doblete al jardín izquierdo, anotando con biangular a la misma zona de Jesús Pepón Valdez para la primera carrera de los emplumados.
Cabe señalar que en el Kukulcán, a pesar de ser considerado un parque para el pitcheo, sólo se han conseguido dos juegos sin hits ni carreras; el primero en 1982 con los lanzamientos de Jesús Hernaiz, de los Azules de Coatzacoalcos, y el segundo en 1992, este logrado por Andrés Cruz, de los Leones, contra Charros de Jalisco.
También, sólo existe en la historia del parque de la Serpiente Emplumada un juego perfecto, el que consiguió Oscar Rivera en el postemporada, el único logrado en esa instancia en la Liga Mexicana, en 2005 ante Guerreros de Oaxaca.
Los melenudos terminaron la semana perdiendo su tercera serie de la temporada, segundo en casa, la primera fue de vista ante los Olmecas de Tabasco y el segundo en el parque Kukulcán ante los Tigres de Quintana Roo.
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
GH