La ronda eliminatoria de tiro con arco en los Juegos Olímpicos de París 2024 fue testigo de un momento conmovedor protagonizado por la arquera mexicana Alejandra Valencia. En sus cuartos Juegos Olímpicos, Valencia no pudo contener la emoción, derramando lágrimas que reflejaban una mezcla de frustración personal y orgullo colectivo.
"Siento que pudo haber sido mucho mejor", confesó Valencia, evidenciando una autocrítica rigurosa típica de los atletas de élite. No obstante, su desempeño individual quedó eclipsado por el logro del equipo mexicano, que aseguró el tercer lugar en la clasificación por equipos.
"Lo bueno es que quedamos en tercero del equipo, que es algo que estábamos buscando", añadió, resaltando la importancia de este resultado para las aspiraciones olímpicas de México.
La emoción de Valencia también fue un tributo al esfuerzo colectivo: "Siento emoción, saber que estamos ahí después de todo lo que nos ha costado". Esta declaración subraya el arduo camino recorrido por el equipo para llegar a esta instancia olímpica.
Demostrando un espíritu de equipo inquebrantable, Valencia elogió a sus compañeras Ana Paula Vázquez y Ángela Ruiz.
"No tiré bien, pero mis compañeras sí, y ellas sacaron también la fuerza. Somos equipo, con las tres que vamos"
Este episodio emocional pone de manifiesto la intensa presión que enfrentan los atletas olímpicos y la importancia del apoyo mutuo en los deportes de equipo. A pesar de la autocrítica de Valencia, el desempeño del equipo mexicano genera optimismo para las próximas fases de la competencia en París 2024, que serán el domingo y donde subir al podio es su meta y la carta fuerte de la delegación mexicana.
AG