Sophie Gómez llegó a México para cumplir sus sueños. Nació en Francia y estudió en España, pero ejerce su profesión en nuestro país, y con esa honestidad que la caracteriza confesó a Vanguardia que decidió darle un giro a su carrera.“Es que siempre son los mismos personajes”, enfatizó.
Gómez ha participado en producciones como Rosario Tijeras y El Señor de los Cielos, y últimamente ha rechazado algunas ofertas porque considera que “mientras no haya proyectos que quiera hacer, pues no hay nada (risas)”. En Monarca le da vida a Amelia Fritz, una mujer que hace su introducción desde el primer capítulo y en donde nos queda claro que es un personaje con mucho poder, quizás más del que tienen los Carranza.
¿Quiénes son los Carranza? El eje conductor de la serie. Una familia adinerada de México cuyo imperio traspasa fronteras. Los Carranza se mueven en el mundo de la industria tequilera y claro, cuando hay tanto dinero y tanto poder, no todo puede salir bien. La sinopsis dicta: “Ambientada en el poderoso mundo de los multimillonarios mexicanos, Monarca es una saga familiar multigeneracional de un imperio empresarial nacido del tequila, y la batalla que se produce cuando la hermana decide regresar de Los Ángeles para luchar contra el sistema corrupto que su familia ayudó a crear”.
En ese sentido, Sophie realizó un casting para la producción de las empresas Ventanarosa, Lemon Studios y Stearns Castle. “Luego me enteré de que fue Fernando Rovzar el que había pedido que yo fuera al casting, yo ya había tenido una experiencia previa con él. Si a mí Fernando me habla para hacer un personaje, es casi que ni necesito leer, confío ciegamente en su talento y en lo que hace Lemon Films, una productora que me parece de mucha calidad”.
En cuanto a Amelia Fritz confesó: “Mira, cuando me senté con Fernando por primera vez, que la serie todavía no estaba escrita del todo, me quiso explicar, ‘tú personaje es el dinero’. Es por Amelia por donde llega el dinero pero desde otro nivel, porque los Carranza son multimillonarios, pero ella es mucho más poderosa, pertenece a ese grupo de personas que mueven el mundo, ya ni son familias ni gente en particular, son corporaciones y sistemas financieros que manejan cantidades de dinero fuera de lo común. Amelia es la que le consigue el dinero a Joaquín para que él pueda hacer sus movimientos (risas), es difícil, así que hay que dejarlo así (risas)”.
Sophie ha descubierto de la mano de su personaje que “el mundo del dinero es un mundo que no tiene fronteras, y el dinero se va a donde está el poder y a donde hay intereses, no tiene moral, y una mujer como mi personaje solo ve la posibilidad de negocio, es una mujer que se ha ido moviendo en función de sus negocios y sus lealtades irán variando según sus necesidades. Hay un mundo que nosotros los mortales no entendemos, primero porque tiene demasiados ceros, yo a partir de cierto número de ceros ya no entiendo, yo creo que somos un poco así (risas), pero eso existe y es lo que mueve el mundo”.
Personajes femeninos, son muy poderosos
Monarca es un sueño que también se le cumplió a Salma Hayek. La mexicana es la productora ejecutiva de esta serie creada por Diego Gutiérrez. Y en diversas entrevistas, dijo que no quería que la historia fuera completamente feminista, pero sí quería dar cierta importancia y visibilidad a los personajes femeninos, desde la matriarca de la familia Carranza, interpretada por Rosa María Bianchi.
Y para Sophie Gómez, efectivamente, hay muchos personajes femeninos muy importantes.
“La verdad son unos personajazos, se nota en la matriarca ¿no?, obviamente y claramente, o como el personaje de Gaby de la Garza, que será criticable pero es una mujer que dice ‘ya basta’. Fernando me dijo que mi personaje iba a ser un hombre pero pensaron que sería más interesante que fuera una mujer, creo que si llega a haber una segunda temporada muchos de estos personajes femeninos van a tomar todavía más fuerza”.
Salma Hayek en un mundo de hombres
Salma, también confesó a los medios nacionales que durante muchos años trató de trabajar en México con producciones propias, pero se topó con un enorme machismo en la industria, por lo que Monarca significaría un progreso.
“Es que, está tan arraigado que uno no se da cuenta, y ya después te cae el veinte, mis compañeros actores siempre cobran más que yo, ¡siempre!, y entonces dices ‘bueno, es que es más famoso’, ‘bueno, es que yo no soy mexicana’, ‘es que él lleva más tiempo’ y ¡no!, son pretextos que te dan pero la realidad no es esa. “He tenido la fortuna de no tener experiencias desagradables, pero en cosas cotidianas no nos damos cuenta, pasan cosas que tú justificas”. VANGUARDIA