Una nueva controversia sacude la carrera de Luis Miguel después de que el piloto Raúl Aldana revelara en el programa Chismorreo una deuda pendiente de más de 300 mil dólares por servicios de aviación privada. El incidente se relaciona con vuelos realizados después de su exitosa gira internacional.
Según el testimonio de Aldana, mientras los vuelos de la gira fueron cubiertos por la empresa promotora sin contratiempos, los problemas surgieron cuando el equipo de Luis Miguel solicitó viajes adicionales a Madrid y Valencia. Estos servicios extras, que incluían múltiples escalas, nunca fueron liquidados por el artista o su equipo.
La empresa de aviación, lejos de buscar un conflicto legal, expresa su deseo de llegar a un acuerdo amistoso con el cantante. Hasta el momento, ni Luis Miguel ni su equipo han emitido declaraciones sobre estas acusaciones que contrastan con el éxito de su reciente gira por América y España.
AG