Este 16 de abril se conmemora el Día Mundial contra la Esclavitud infantil, el origen de esta fecha proviene del asesinato de Iqbal Masih de 12 años, ocurrido en el año 1995, quien con tan solo 4 años de edad fue vendido por su padre a una fábrica de alfombras de Punjab pues a su familia le faltaba dinero para la boda del hijo mayor.
Iqbal realizaba largas jornadas de trabajo bajo unas durísimas condiciones de explotación y maltrato, por las que recibía 1 rupia diaria, con lo que los intereses de la deuda de su padre se fueron incrementando. En 1992, con 10 años de edad, consiguió la libertad gracias a Ehsan Ullah Khan, fundador del Frente de Liberación del Trabajo Forzado.
A partir de ese momento Iqbal se convirtió en la voz de todos aquellos niños que seguían esclavizados. Luchó por los Derechos Humanos y la dignidad de todos ellos, en contra de la explotación laboral a la que eran sometidos, consiguiendo que numerosas empresas de confección de alfombras fueran cerradas.
Su activismo mejoró las condiciones de vida de muchos niños como él y le costó la vida. El 16 de abril de 1995, Iqbal Masih fue asesinado por mercenarios, suponiéndose que las mafias del negocio de las alfombras en Pakistán encargaron su crimen. Tenía sólo 12 años, había pasado la mayor parte de su vida esclavizado en fábricas.
Por eso en 1998 se instauró el 16 de abril como Día contra la Esclavitud Infantil. Se calcula que, en el mundo, 400 millones de niños y niñas como Iqbal están sometidos a las peores formas de explotación laboral infantil, siendo esclavizados en trabajos denigrantes y peligrosos para su salud y desarrollo.
AR