Hay cosas en la vida, como comer, respirar, morir e ir al baño, que nadie en el mundo puede evitar, sobretodo porque son cosas que nos hacen iguales a todos los seres humanos; aproximadamente pasamos 92 días sentados en el inodoro.
Y al ser esta una actividad tan común, no es extraño pensar que la Organización de las Naciones Unidas, en 2013, haya designado el 19 de noviembre como el 'Día Internacional del Inodoro', para hacer consciencia sobre la crisis de saneamiento global y para hacer del cuidado del agua potable una prioridad de las naciones.
En el último reporte, en 2021, se contaban en el mundo 3 mil 600 millones de personas sin acceso a un aseo seguro, pero eso no es lo más alarmante, ya que se tiene un cálculo de que, aproximadamente, al menos 2000 millones de personas usan una fuente de agua potable contaminada con residuos fecales.
En cada año, la ONU lanza una temática en el marco de la celebración del 'Día del Inodoro', esta ocasión lo hace con el lema "Hacer visible el recurso invisible", que busca centrar la atención en el saneamiento de las aguas subterráneas que con el paso del tiempo corren el riesgo de que ríos, lagos y suelos sean contaminados con excremento, poniendo en riesgo la vida de miles de personas y del medio ambiente.
Al parecer sentarse en el inodoro, más allá de ser la oportunidad ideal para leer, ver videos en tiktok o interactuar en redes sociales, para muchos es un sueño inalcanzable y para otros un verdadero privilegio.
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AA