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Cómo son las personas transespecies

Manuel de Aguas revela detalles de lo que significa vivir bajo esta condición y la discriminación de la que ha sido víctima
Manel de Aguas habla sobre la discriminación que sufre por sus aletas de pez en la cabeza y ser transespecie / Twitter

Manel De Aguas, es un artista cyborg español y activista de transespecies radicado en Barcelona que se convirtió en principal tema de conversación en más de una red social por desarrollar e implantar dos aletas sensoriales del clima en su cabeza.

Si bien asegura que no se trata de ningún accesorio sino de una parte de su cuerpo, de lo que sí puede dar fe es de la intolerancia tanto de la gente en Internet como en el mundo real. Este es el relato de la historia de vida de un transespecie.

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Al joven de 24 años de edad, le trajo una gran cantidad de críticas en redes sociales ya que también ha sufrido discriminación al grado de que le han negado empleos necesarios para continuar con su vida diaria, así lo relato en entrevista para PlayGround. 

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El joven relató que en una ocasión intentó ingresar a una iglesia, pero por las aletas en la cabeza le fue negado el paso: ““Parece ser que la iglesia hoy no acoge a gente transespecie aunque estén las capillas repletas de ángeles, que al final no dejan de ser humanos con alas”. 

“Hay gente por la calle que se me queda mirando y se ríe de mi aspecto. Otras que me gritan cosas como: ‘¡Fauno! ¡Astérix! ¡Pokémon!’. En la mayoría de las entrevistas de trabajo me descartan de inmediato a la que ven que tengo dos aletas en la cabeza.

¿Cómo son las personas transespecies?

Los “transespecie” o “zoosexuales” pretenden que la sociedad entienda su sentimiento y sus sensaciones, porque consideran que ni su anatomía ni su morfología definen su especie animal. Ellos no se sienten humanos.

De hecho, han dado un paso más quieren renunciar a sus derechos humanos para ser amparados por los de protección animal. Quieren ser reconocidos y aceptados sin ser juzgados por sentirse animales presos en un cuerpo humano.

Los hombres y mujeres trans-especies no se identifican como seres humanos, si no como especie animal: pájaros, perros, gatos. Sienten que están atrapados en cuerpos que no les pertenecen, se visten y actúan como si fueran de diferentes especies.

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AR