El Paso, Texas, EU, 25 de diciembre (AP).— Un niño guatemalteco de 8 años de edad falleció estando detenido por las autoridades de inmigración estadounidenses , dijeron voceros, siendo el segundo caso de un niño migrante que muere este mes bajo custodia estadounidense.
El Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza dijo que el menor falleció después de la medianoche el martes.
El niño “mostraba síntomas de una potencial enfermedad” el lunes y fue llevado junto con su padre a un hospital en Alamogordo, Nuevo Mexico, dijo el servicio.
Allí, agregó la agencia, se diagnosticó que el niño estaba resfriado y tenía fiebre. Se le dieron las medicinas amoxicilina e Ibuprofeno y fue dado de alta el lunes.
La agencia dijo que esa misma noche el niño fue llevado de vuelta al hospital con náuseas y vómitos y que falleció poco después.
Añadió que no se ha determinado la causa de fallecimiento, y que avisó tanto a la inspectoría interna del Departamento de Seguridad Nacional como al Gobierno de Guatemala.
Prometió “una investigación exhaustiva e independiente de las circunstancias”.
Las autoridades no han revelado cuándo padre e hijo ingresaron a suelo estadounidense ni por cuánto tiempo estuvieron detenidos. En el comunicado, la agencia fronteriza solo dice que el chico había sido “previamente detenido”.
Alamogordo está a unos 145 kilómetros de la frontera entre México y Estados Unidos en El Paso, Texas.
Rubén García, director de un albergue para inmigrantes en El Paso llamado Annunciation House, dijo el martes que no tenía razón para creer que padre e hijo habían estado allí, pero que necesitaba más información sobre lo sucedido.
Este es el segundo caso de un menor que muere en custodia de las autoridades estadounidenses. El pasado 13 de diciembre, una niña guatemalteca murió de deshidratación cuando era custodiada por agentes fronterizos de Estados Unidos, informa The Washington Post.
Nick Miroff y Robert Moore, del medio estadounidense, explican que la pequeña, de 7 años de edad, iba a cruzar ilegalmente la frontera junto a su padre, pero autoridades los detuvieron.
“La niña y su padre fueron detenidos alrededor de las 10 pm del 6 de diciembre al sur de Lordsburg, Nuevo México, como parte de un grupo de 163 personas”, reporta el Post.
La menor se convulsionó la mañana del 7 de diciembre, después de no haber comido ni bebido durante horas.
“La niña no se recuperó y murió en el hospital menos de 24 horas después de ser transportada”, detalla información a la que tuvieron acceso los periodistas.