Por Marina Menéndez
Fotos Lisbet Goenaga
(Especial para Por Esto!)
LA HABANA, Cuba, 14 de septiembre.- Se sabe que en Cuba, una fiesta entre amigos casi siempre acaba con todos coreando las famosas “Lágrimas Negras” de Miguel Matamoros, casi un símbolo de identidad nacional. Pero también es conocido que en el mejor momento del ágape, cuando los brindis alcanzan su mayor nivel, la gente entona una ranchera —si es “El Rey” mucho mejor— aunque la pieza nada tenga que ver con la tradición musical de la Isla.
El apego de sus habitantes por “lo mexicano” les viene de lejos; no sé a ciencia cierta si debido a la profusión aquí de los filmes de la llamada Época de Oro del cine mexicano, que hizo tan cercanos a artistas de la talla de Jorge Negrete, Pedro Armendáriz, Tin Tan y María Félix. O si, al final, lo que nos emparenta es esta cercanía geográfica convertida en relación filial. El caso es que aquí gusta todo lo de México.
La presencia de esa nación en este pedazo antillano se ha hecho más visible estos días, en vísperas del Grito de Dolores y la sagrada fecha de la independencia, gracias a una Semana de la Cultura mexicana que se ha extendido por varios días y en distintos lugares.
Mucho debe la variada conmemoración a la Embajada de México, promotora de una Semana de cine en la sala Acapulco de la capital con cinco sonados clásicos de la filmografía mexicana, y resultado del esfuerzo conjunto de la Cinemateca cubana y la Cineteca de México.
También hubo un espectacular concierto de la cantautora Rosalía León acompañada por el guitarrista César Huesca y renombrados artistas cubanos en el Museo de Bellas Artes, y hasta un concurso de intérpretes de la música mexicana donde no faltaron los intérpretes, tan abundantes como son los mariachis en Cuba en estos tiempos.
Varios de los más renombrados hoteles cubanos, donde se hospedan cada año miles de turistas mexicanos que forman una buena parte de los cuatro millones que recibe la Isla, se prepararon jornadas especiales dedicadas a esa nación.
Así ocurrió, por ejemplo, en el Hotel Habana Libre de la capital, donde el chef mexicano José Manuel Baños estuvo al frente durante tres días seguidos de cenas donde se presentaron los más emblemáticos platos de su patria.
Le auxilió el joven Alberto Morales, quien dio a conocer a Por Esto! la alegría de estar en Cuba y, como su colega, vino del restaurante mexicano Pitiona, de Oaxaca, expresamente para esta ocasión.
Juntos, chef y ayudante prepararon un menú especial de comida oaxaqueña que incluyó canapés, sopas, pastas, platillos preparados con mole, y otros de la cocina de su terruño y, específicamente, de su restaurante, tales como tamalitos de frijol en hojas de aguacate, caldo de frijol con cangrejo, o costras de chapulín.
Este viernes ofrecieron una gala en la que estuvieron miembros del cuerpo diplomático y amigos del hotel.
Y se sumaron, igualmente, cubanos que a título personal y sin convocatoria de institución alguna, se entusiasmaron a celebrar la fecha patria mexicana.
Ese es el caso del restaurante privado La Esencia, del Vedado, una “paladar” que se esmeró porque las celebraciones no pasaran por alto, y para ello ambientó el lugar con banderas mexicanas, cactus y sombreros rancheros, sin olvidar a sus dependientes, que usaron trajes típicos norteños, incluido para los hombres el bigote postizo.
La perla de la corona fue la presentación del tequila Patrón, cuyo “lanzamiento” se efectuó este viernes —a mitad de precio el trago para los mexicanos—, amenizado por mariachis del patio.
Alejandro Otero, titular del restaurante, explicó a Por Esto! que La Esencia se preocupa por caracterizar el lugar ante acontecimientos internacionales importantes como el que nos ocupa.
Para esta ocasión, narró, alistaron además una carta que procuró ajustarse lo mejor posible a las tradiciones mexicanas: burritos, guacamole, nachos.
“No pretendemos llegar a la altura y la riqueza de la comida mexicana; se trata de dar una muestra. Que se parezca. Y hasta ahora la aceptación ha sido muy buena. Es que a los cubanos les gusta mucho la ‘onda’ mexicana. Al cubano le gusta mucho lo de México…”, reflexionó.
Para sábado está prevista una velada en la sede de la Embajada de México aquí, donde amigos de esa nación querida recibirán a decenas de amigos para celebrar, juntos, la fecha más importante de su patria.