Internacional

CARACAS, Venezuela, 22 de enero (EFE/AFP).- El presidente venezolano, Nicolás Maduro, dijo este martes que ordenó una “revisión total, absoluta de las relaciones con el Gobierno de los Estados Unidos” y advirtió que en las próximas horas se tomarán decisiones de “carácter político y diplomático”.

El jefe de Estado dijo que ya ordenó a su canciller, Jorge Arreaza, entregarse a esta revisión.

La advertencia de Maduro se produce horas después de que el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, difundiera un video en el que le llama dictador y transmite su apoyo a los venezolanos un día antes de la marcha antigubernamental a la que ha convocado el Parlamento de Venezuela de mayoría opositora.

Según Maduro, “nunca antes un funcionario del más alto nivel había salido a nombre de su Gobierno (...) a decir que en Venezuela la oposición debe derrocar al gobierno como sea”.

“Ya lo hemos denunciado y lo vamos a enfrentar”, sostuvo tras denunciar que Washington “quiere violencia” en Venezuela.

En esta misma jornada la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, dijo que las declaraciones de Pence, son un llamamiento “abierto” a un golpe de Estado en el país caribeño y aseguró que el Gobierno de Maduro “no va a permitir” que Washington se inmiscuya en sus asuntos.

La vicepresidenta sostuvo la denuncia hecha minutos antes por su hermano, el ministro de Información venezolano, Jorge Rodríguez, quien dijo que Pence ha ordenado actos violentos en el país caribeño y aseguró que para la marcha opositora que se prepara para mañana ha ordenado crear “falsos positivos”.

En el vídeo, Pence le dice al pueblo de Venezuela: “Estamos con ustedes”.

La oposición venezolana convocó este 23 de enero a una marcha en rechazo al segundo mandato del jefe de Estado desde distintos puntos de Caracas (capital) entre los que se cuenta la barriada de Cotiza, donde ayer se sublevaron militares contra el Gobierno.

El chavismo gobernante también convocó a movilizaciones desde distintos puntos de la ciudad, uno de los cuales, en la Avenida Nueva Granada en el oeste, donde también se concentrará la oposición.

Sobre la movilización, Maduro pidió “máxima conciencia y máxima movilización para defender la patria”, al tiempo que dijo que serán tomadas “todas las medidas de seguridad”, concluyó.

Promover la violencia

El ministro de Información de Venezuela, Jorge Rodríguez aseguró que el partido opositor Voluntad Popular (VP) al que pertenece el presidente del Parlamento, Juan Guaidó, y al que se refirió como un “grupo terrorista”, está siguiendo estas órdenes de efectuar actos de violencia y los acusó de robar armas de la Fuerza Armada.

Dijo que de un centro de la Guardia Nacional (policía militarizada) habían sido extraídas 51 “armas de guerra” en su mayoría “fusiles de alto calibre de esas armas de guerra que fueron robados por orden del grupo terrorista Voluntad Popular” y que fueron recuperadas 40.

“¿Y para qué? Las primeras investigaciones señalan que, así lo confiesan algunos de los que robaron las armas el día de ayer, que les fueron entregados a civiles pertenecientes a la célula terrorista VP para que se perpetraran hechos violencia, heridos y muertes en la manifestación opositora del día 23 de enero”, dijo.

Explicó que esta “operación de falsos positivos” implicaría “uniformar a estas células terroristas” supuestamente entrenadas en las ciudades fronterizas de San Cristóbal (Venezuela) y Cúcuta (Colombia) con uniformes de la Fuerza Armada Venezolana.

Estos falsos militares, según Rodríguez, “eventualmente dispararían el día de mañana contra la manifestación opositora Para qué? Para cumplir las órdenes de Mike Pence”.

Toda esta organización de manifestaciones, que se habría iniciado ayer en zonas populares de Caracas con protestas en las que fue quemada una casa cultural chavista, “lo que persigue justamente es promover la desestabilización y la violencia en Venezuela”, dijo el funcionario.