LONDRES, Inglaterra (AP/ EFE).- A tres días de que Gran Bretaña se convirtiera en el primer país en la historia en dejar el bloque de 28 miembros, la Unión Europea aceptó el lunes aplazar la salida británica de la Unión Europea (“brexit”) hasta el 31 de enero para evitar un caos.
Los embajadores de los Veintisiete tomaron la decisión durante una nueva reunión hoy, después de que el viernes no lograran acordar de forma unánime la duración de la nueva prórroga.
“Los Veintisiete han acordado que aceptarán la petición del Reino Unido para una extensión flexible del ‘brexit’ hasta el 31 de enero de 2020”, escribió el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, en su perfil de Twitter.
La decisión fue bien recibida por políticos británicos y de la UE, pero no por el ministro Boris Johnson, que hace apenas semanas dijo que “preferiría morir en una zanja” que posponer la fecha de salida.
Al final, la opción no estuvo en sus manos. El Parlamento británico forzó a Johnson a pedir el aplazamiento para evitar un “brexit!” sin un acuerdo con la UE, que dañaría las economías británica y europea.
En una carta al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, Johnson dijo que bajo la ley británica “no tengo discreción para hacer otra cosa que confirmar el acuerdo formal del Reino Unido sobre esta extensión”.
Pero dijo que la demora era “indeseada” y que le fue “impuesta a este gobierno contra su voluntad”.
Johnson llamó a los otros 27 miembros de la UE a “dejar claro que una extensión más allá del 31 de enero no es posible”.
Es la tercera vez que se retrasa la fecha desde el referendo en junio de 2016 sobre la salida británica de la UE.
Johnson busca ahora una elección adelantada como forma de romper el impasse político en el país. Él espera que los votantes le den a su Partido Conservador una mayoría que le permita aprobar el acuerdo de separación al que llegó con la UE y finalmente sacar a Gran Bretaña del bloque.
“La única forma de conseguir el “brexit” es acudir al pueblo de este país”, les dijo Johnson a los legisladores, y acusó a sus oponentes de traicionar la decisión de los votantes, hace más de tres años, de dejar la UE.
Dijo que “no podemos continuar con esta demora sin fin”.
Pero Johnson enfrentaba una dura batalla para persuadir a los legisladores opositores a respaldar su pedido de comicios.
Johnson asumió el cargo en julio con promesas de concluir el “brexit”, luego que su predecesora, Theresa May, renunció derrotada. El Parlamento rechazó tres veces el acuerdo de separación de May y la UE aplazó la salida británica del 29 de marzo primero a abril y luego a octubre.
Johnson ha enfrentado un estancamiento similar en el parlamento, que bloqueó sus intentos de aprobar su acuerdo del “brexit” antes del plazo de octubre y le hizo pedirle más tiempo a la UE.
El primer ministro quiere ahora aprobar su propuesta de “brexit” en el Parlamento antes de una elección, pero los oponentes de Johnson no quieren darle esa victoria. Su pedido el lunes de elecciones para el 12 de diciembre -más de dos años antes de los próximos comicios programados- necesita el respaldo de dos terceras partes de los legisladores para ser aprobada y los partidos de la oposición están renuentes a realizar elecciones bajo los términos de Johnson.