'Nos tiraron a matar, ¡y estamos vivos!”

LA HABANA, Cuba.- El Presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, invitó al pueblo a festejar al cierre de 2019, luego de un año en que la agudización de la agresividad estadounidense no pudo derrotarnos, y a la que le arrancamos no pocas victorias, razón por la cual felicitó a sus compatriotas.

“No nos han podido vencer ni por la presión, ni por la seducción”, dijo el mandatario al repasar los acontecimientos de un año de agresión que calificó de “demente y brutal”, y que es exacerbación de la política del bloqueo: el mayor obstáculo al desarrollo cubano, y cuyo impacto puede verse en los resultados económicos del país, y sufre mayormente el pueblo.

“El enemigo ha convertido la economía cubana en el primer objetivo a destruir, para demostrar que el socialismo es inviable (…) No solo nos interesa resistir, el desafío es conquistar, en medio de esa misma guerra, la mayor prosperidad posible”, aseveró Díaz-Canel.

Tanto el comienzo como el fin de sus palabras estuvieron dirigidos a sus compatriotas. “Junto al pueblo, por el pueblo y para el pueblo, todo es posible”, aseguró, al inicio de su discurso.

La de este sábado fue una alocución encendida que repasó también los retos de 2020, y constituyó cierre de las sesiones plenarias del Parlamento, que siguió adentrando al país en su renovada institucionalidad con la aprobación de Miguel Marrero como primer ministro, y de la membresía del Consejo de Ministros.

También hubo noticias en sus palabras, al confirmar el alistamiento de leyes contra la discriminación y para la protección animal, así como un cercano ordenamiento monetario que el país espera.

Ese proceso, informó, está en fase avanzada de estudio y aprobación pero, advirtió, no será un canje de moneda, y se garantizarán todos los depósitos.

Medidas de ahorro y de solidaridad popular puestas en práctica para hacer frente a la escasez de combustible dictada por el cerco de EE.UU. -que en este año sancionó a más de diez compañías que transportan combustible a la Isla y el Presidente calificó como “piratería”- serán en lo adelante actitudes a mantener, más allá de la espontaneidad.

Díaz-Canel finalizó con el convite al festejo. “Que todas las plazas de Cuba se llenen de música y de alegría. ¡En el año 61 de la Revolución nos tiraron a matar y estamos vivos! ¡Vivos, celebrando y empeñados en seguir ganando!”, exclamó.

Posteriormente, la Asamblea Nacional acordó que 2020 será el Año 62 de la Revolución.

Simpatías y solidaridad hacia AMLO

En otra parte de sus palabras, el Presidente cubano destacó que la Isla ha rehusado morder el anzuelo de las provocaciones desde EE.UU. y preservado los lazos formales, en procura de mantener relaciones que permitan los vínculos familiares y de comunicación entre ambos países.

Pero Cuba adoptará las medidas necesarias para frenar los propósitos intervencionistas de EE.UU. y salvaguardar su soberanía e independencia, advirtió.

También criticó el neoliberalismo, que empobrece a naciones que ayer fueron prósperas, como puede verse en Argentina, dijo.

Bajo igual esquema, el modelo chileno muestra su incapacidad para resolver los problemas sociales, destacó el mandatario cubano, quien manifestó las simpatías y solidaridad con el gobierno de Manuel López Obrador en México, y aplaudió la elección de Alberto Fernández y Cristina Fernández al frente del ejecutivo argentino.

Díaz-Canel también expresó la mantenida solidaridad con los gobiernos de Venezuela y Nicaragua, y reiteró la condena al golpe de Estado en Bolivia, y el respaldo a Evo Morales Ayma.

La vigencia de la Celac y la importancia del papel vigoroso del Movimiento NOAL para los países del sur, también estuvieron en su discurso.

El primer ministro

La propuesta de Manuel Marrero como primer ministro de Cuba fue presentada al plenario por Díaz-Canel tomando en cuenta su condición de diputado de amplia trayectoria y cualidades, entre las que el Presidente resaltó su honestidad, capacidad de trabajo y fidelidad al Partido y a la Revolución.

Su capacidad de interactuar con otros órganos de la institucionalidad cubana y, desde la esfera de Turismo, la rica experiencia demostrada en las negociaciones con las contrapartes extranjeras y capacidad de interlocución, también fueron mencionadas por Díaz-Canel antes de que el plenario respaldara, de forma unánime, la propuesta.

Manuel Marrero se desempeñaba como ministro de Turismo desde hace 16 años. Tiene 56 años de edad, es arquitecto de profesión, y se inició en el Turismo desde distintos puestos en la empresa Gaviota.

De igual forma, Díaz-Canel presentó las propuestas de los Viceprimeros Ministros, del Secretario y demás miembros del Consejo de Ministros, las cuales fueron aprobadas por el plenario.

Intenso trabajo legislativo y electoral

Lo previsto en la Constitución indica que en los primeros meses de 2020 deberá elegirse a otras nuevas figuras institucionales: los gobernadores, a nivel provincial, y en los municipios, a los intendentes como jefes de los gobiernos locales.

Además, y según se informó en la plenaria de este sábado, el Parlamento tendrá ante sí 107 normas jurídicas de rango superior -entre leyes y decretos-leyes-, que deberán ser debatidas y aprobadas por el legislativo en esta legislatura para materializar los Lineamientos emanados del VI y VII congresos del Partido Comunista de Cuba, por lo cual deberán estar listas antes del VIII Congreso, que se celebrará en abril próximo.

Siguiendo también las disposiciones transitorias de la nueva Constitución, en marzo de 2021 se debatirá el Nuevo Código de Familia, que hace tiempo es demandado por amplios sectores de la población, para que ese proyecto legislativo sea discutido con amplitud en el Parlamento y aprobado finalmente por los diputados en diciembre, tras lo cual se someterá a referendo popular.

En total, suman 39 las leyes y 31 los decretos-leyes para la actual legislatura, entre las cuales se encuentra también la que amplía y flexibiliza las prerrogativas de la empresa estatal socialista, identificada en la Constitución como el motor principal de la economía. Otras 24 leyes y 13 decretos-leyes quedarán para la próxima legislatura.

El Parlamento también ratificó los acuerdos adoptados (214) por el Consejo de Estado desde julio a la fecha, entre los que se halla la adopción de acuerdos internacionales y decretos-leyes, entre otras disposiciones emitidas por ese órgano.

Mano auxiliar del presidente

Amplias expectativas ha despertado el nombramiento de un primer ministro, figura existente hasta 1976 en la figura de Fidel Castro y plasmada ahora en la nueva Constitución.

En declaraciones a un programa televisivo, el titular de la Comisión de Asuntos Constitucionales y Jurídicos del Parlamento, José Luis Toledo Santander, lo describió como figura importante que puede ejecutar la dirección y jefatura del gobierno de la República, sin menoscabar las prerrogativas del Presidente.

Una de las experiencias del devenir de la nación es que era mucha la carga de trabajo que descansaba sobre una persona en la dirección del Estado y del Gobierno, explicó Toledo. Ahora se desplaza esa carga a dos autoridades que la acometan.

El Jefe de Estado, es decir, el Presidente de la República, preside también el Consejo de Ministros y tiene toda la autoridad para desarrollar esa labor, y el Primer Ministro lo auxilia, lo apoya, y ejecuta las acciones.

En los próximos meses, recordó, se presentará una ley de funcionamiento del Consejo de Ministros, texto donde esas funciones estarán más ampliamente detalladas.