The Guardian.- Veinte de las 479 personas que fueron evacuadas de escenas terroríficas a bordo del problemático crucero noruego Viking Sky han sido hospitalizadas por lesiones, según surgen informes de que el barco escapó por poco de una catástrofe más grande.
Cerca de 900 pasajeros y tripulantes siguen esperando ser rescatados a bordo del lujoso crucero mientras se remolca hacia el puerto de la cercana ciudad de Molde.
El barco estaba cojeando para ponerse a salvo el domingo por la mañana, en medio de una operación de rescate dramática que vio a cientos de personas transportadas en helicóptero a la costa en cinco helicópteros que volaban en la oscuridad total cuando la nave impotente fue arrojada en mares agitados.
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Según el periódico noruego Bergens Tidende, el crucero estaba a solo 100 m de las rocas que golpeaban en un terreno poco profundo cuando finalmente logró anclar y girar, evitando encallar en el último minuto.
Amigos y familiares de los que estaban a bordo acudieron en pánico a las redes sociales en busca de actualizaciones, ya que los pasajeros publicaron videos y fotos que mostraban sillas, grandes macetas y otros muebles rodando por el suelo y chocando contra las paredes, y partes del techo cayendo sobre los pasajeros. El buque pesadamente balanceándose. Los pasajeros llevaban chalecos salvavidas de color naranja cuando las olas rompían puertas y ventanas y el agua fría caía sobre sus pies.
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Los rescatistas evacuaron a 479 de los 1,373 pasajeros y miembros de la tripulación del crucero después de que comenzó a tener problemas con el motor debido al mal tiempo en la costa occidental de Noruega el sábado por la tarde, en un área conocida por sus aguas difíciles e impredecibles.
La Cruz Roja Noruega informó que los pasajeros evacuados habían sufrido "moretones, fracturas y cortes".
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"Vimos a dos personas sacadas en camilla", dijo un pasajero, Dereck Brown, al periódico noruego Romsdal Budstikke. “La gente estaba alarmada. Muchos estaban asustados pero estaban tranquilos".
Los pasajeros son principalmente una mezcla de ciudadanos estadounidenses, británicos, canadienses, neozelandeses y australianos. El presidente de Viking Ocean Cruises, Torstein Hagen, le dijo al periódico noruego VG que los eventos que rodearon el Viking Sky fueron "algunos de los peores en los que he estado involucrado, pero ahora parece que va bien al final y que hemos tenido suerte".
La embajada británica en Oslo tuiteó: "Estamos en contacto con las autoridades noruegas y el personal de la embajada británica se desplegará en Molde para ayudar a cualquier persona británica que necesite nuestra asistencia".
Algunos familiares de pasajeros criticaron a Viking Cruises por no comunicarse con las familias de los que estaban a bordo, no establecieron de inmediato una línea de emergencia y obligaron a las personas a acudir a las redes sociales para obtener actualizaciones sobre sus seres queridos.
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Viking Cruises dijo en un comunicado el domingo por la mañana que 436 pasajeros y 458 tripulantes permanecían a bordo mientras el barco estaba "a salvo" acompañado a Molde.
"Los 479 pasajeros que fueron transportados por aire desde el barco se encuentran actualmente en la costa y se han hecho arreglos para llevarlos a casa, y los primeros pasajeros salen hoy", dijo el comunicado.
"Actualmente entendemos que 20 personas sufrieron lesiones como resultado de este incidente, y todas están recibiendo atención en los centros médicos relevantes de Noruega, y algunas ya han sido dadas de alta".
Einar Knudsen, del Centro de Rescate Conjunto de Noruega, dijo a The Guardian que el capitán del Viking Sky había solicitado que se detuvieran las evacuaciones por el momento, ya que el barco está siendo escoltado hacia el continente con la ayuda de dos remolcadores a aproximadamente 7 a 8 nudos por hora.
Viking Cruises agradeció al Norwegian Redningssentral y a los servicios de emergencia noruegos "por su apoyo y habilidad demostrados en el manejo de la situación en condiciones climáticas muy difíciles", así como a los residentes locales por su apoyo y hospitalidad.
Los pasajeros fueron sacados del barco uno por uno y trasladados en avión a la costa en las primeras horas de la mañana del domingo, en medio de grandes olas y fuertes vientos, y cada helicóptero podía llevar de 15 a 20 personas por viaje. La policía dijo que la tripulación, temiendo que el barco se hundiera, logró anclar en la Bahía de Hustadvika para que pudieran realizarse las evacuaciones.
Según el periódico VG, el teniente de alcalde Jan Arve Dyrnes, de Fræna Kommune, dijo en una conferencia de prensa que se esperaba que el barco llegara a Molde alrededor de las 3 de la tarde del domingo.
VG dijo que la nave emitió una llamada de emergencia cuando el mal tiempo golpeó y los problemas del motor hicieron que comenzara a desviarse hacia la costa rocosa. La policía en el condado occidental de Møre og Romsdal dijo que la tripulación, temiendo que el barco se hundiera, logró anclar en la costa cerca de la ciudad de Alesund para que pudieran realizarse las evacuaciones.
Se enviaron equipos de rescate con helicópteros y botes para evacuar el crucero en circunstancias extremadamente difíciles. Los medios noruegos informaron ráfagas de hasta 38 nudos (43 mph) y olas de más de 8 metros (26 pies) en un área conocida por sus aguas escarpadas y frígidas. La emisora ??pública noruega NRK dijo que la evacuación del Viking Sky fue un proceso lento y peligroso, ya que los pasajeros debían ser izados uno por uno desde el crucero hasta los cinco helicópteros disponibles.
"Tenía miedo. Nunca he experimentado nada tan aterrador", dijo a NRK Janet Jacob, entre el primer grupo de pasajeros evacuados a la cercana ciudad de Molde. Ella dijo que su viaje en helicóptero a la seguridad se produjo en medio de fuertes vientos "como un tornado", lo que la llevó a orar "por la seguridad de todos a bordo".
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El pasajero estadounidense John Curry le dijo a NRK que estaba almorzando cuando el crucero comenzó a temblar. “Solo fue un caos. El viaje en helicóptero de la nave a la costa en el que preferiría no pensar. No fue agradable", le dijo a la emisora. NRK dijo que un hombre de 90 años y su cónyuge de 70 años en el barco resultaron gravemente heridos, pero no dijeron cómo sucedió.
Derek Browne, de Hampshire en Inglaterra, dijo que "todo el barco se tambaleaba, era muy peligroso" antes de que él y su esposa Esther fueran llevados por aire a la seguridad. Browne le dijo a Stephen Nolan de BBC Radio 5 Live: “Tuvimos algunas personas en camillas, varias con cortes, dos con extremidades rotas, pero afortunadamente estábamos bien. Nos llevaron en helicóptero en el helicóptero, lo que fue una experiencia bastante aterradora".
Añadió: "Nunca antes había estado en un helicóptero, había muchos vientos fuertes, flotando sobre mi cabeza y bajé el winchman y luego nos recogimos, así que cerré los ojos cuando llegamos al helicóptero y había 15 de nosotros por unos 20 minutos de viaje".
El área donde la nave se metió en problemas, conocida como Hustadvika, es notoriamente difícil de navegar. La sección poco profunda de 10 millas náuticas de la costa es conocida por sus numerosas islas pequeñas y arrecifes.
"Hustadvika es una de las áreas marítimas más notorias que tenemos", dijo a NRK Odd Roar Lange, un periodista especializado en turismo. Los medios noruegos dijeron que la mayoría de los pasajeros eran turistas británicos y estadounidenses. Para las 6 de la tarde, aproximadamente 100 personas habían sido rescatadas y llevadas a un pabellón deportivo cercano.
Más tarde, surgieron informes de que un barco de carga con nueve tripulantes estaba en problemas cerca y el servicio de rescate noruego local desvió dos de los cinco helicópteros que trabajaban en el crucero para rescatarlos.
Las autoridades dijeron a NRK que una fuerte tormenta con olas altas impidió que los rescatistas usaran botes salvavidas o remolcadores para llevar a los pasajeros a tierra.
"Es un ejercicio exigente, porque [los pasajeros] tienen que aguantar en el aire debajo de un helicóptero, y hay un viento muy, muy fuerte", dijo el testigo Odd Roar Lange a NRK.
El Viking Sky estaba en un viaje de 12 días que comenzó el 14 de marzo en la ciudad noroccidental de Bergen, según el sitio web cruisemapper.com.
Estaba visitando las ciudades noruegas de Narvik, Alta, Tromsø, Bodø y Stavanger antes de su llegada programada para el martes a Tilbury en el río Támesis.
El Viking Sky, un buque con un arqueo bruto de 47.800, se entregó en 2017 al operador Viking Ocean Cruises. La próxima navegación de Viking Cruises, Escandinavia y el Canal de Kiel, que debía embarcarse el 27 de marzo, se canceló y se contactó directamente con los huéspedes y sus agentes de viajes.
La compañía dijo que no se esperaban más cancelaciones en este momento
. Con Associated Press, PA y AFP.