China rechaza la acusación estadounidense de dar marcha atrás en las conversaciones, ya que Trump aumenta las apuestas con planes para aumentar los aranceles el viernes.
China ha rechazado las acusaciones hechas por los Estados Unidos de dar marcha atrás en las negociaciones comerciales y advirtió que no "cederá a ninguna presión" cuando las dos partes se dirijan a negociaciones decisivas.
"EE. UU. Ha asignado muchas etiquetas, como dar marcha atrás, hacer caso a una palabra, etc. Se han hecho muchas promesas a China", dijo el jueves a periodistas en Beijing el portavoz del Ministerio de Comercio de China, Gao Feng.
"China no capitulará ante ninguna presión, y tenemos la determinación y la capacidad de defender nuestros propios intereses", dijo Gao, advirtiendo que "ya se ha preparado para todas las situaciones posibles".
EE. UU. Ha incrementado las apuestas con planes para aumentar los aranceles de $ 200 mil millones en productos chinos del 10 al 25 por ciento a las 12:01 am (04: 01GMT) del viernes, lo que llevó a Beijing a prometer una respuesta con "contramedidas necesarias". Los comentarios de Gao se produjeron como una delegación china encabezada por el viceprimer ministro Liu. Estaba programado para mantener conversaciones en Washington el jueves y viernes. El objetivo de las conversaciones es rescatar el acuerdo comercial que parecía deshacerse después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acusara a China de romperlo y prometió imponer más aranceles si no se llega a un acuerdo.
'Ellos rompieron el trato'
En un mitin en Florida el miércoles, Trump dijo que Beijing pagaría si no se llega a un acuerdo. "Acabo de anunciar que aumentaremos los aranceles en China y no retrocederemos hasta que China deje de engañar a nuestros trabajadores y robar nuestros empleos, y eso es lo que va a pasar, de lo contrario no tenemos que hacer negocios con ellos". Trump le dijo a una multitud que lo vitoreaba. "Ellos rompieron el trato", agregó. "No pueden hacer eso. Entonces pagarán. Si no hacemos el trato, no hay nada de malo en recibir más de $ 100 mil millones al año". Adrian Brown, de Al Jazeera, dijo que en Pekín se había dado cuenta de que es inevitable que haya más aranceles de Estados Unidos sobre los productos chinos. "Queda tan poco tiempo para que los negociadores chinos eviten los aranceles, ahora las conversaciones se reanudan en Washington el jueves, pero solo durarán dos días, solo dos días para tratar de lograr un acuerdo que de alguna manera pueda evitar esta disputa comercial. escalada ", dijo desde beijing. "Podría haber una posible sorpresa, pero creo que es más probable que sea poco probable que haya un acuerdo en el corto plazo, creo que la pregunta es si las dos partes continuarán negociando, si lo hacen, será suficiente para estabilizar los mercados". " Los comentarios de Trump provocaron una ronda de ventas en los mercados asiáticos y europeos. Las negociaciones comerciales son un proceso largo y es normal tener desacuerdos, dijo Gao, y agregó que China está dispuesta a continuar las conversaciones con EE. UU. Para resolver la disputa comercial. Si bien Estados Unidos quiere reducir la escala de su déficit comercial con China, también busca una mejor protección de la propiedad intelectual estadounidense y un mayor acceso al mercado en China para las empresas estadounidenses. Gao describió las acusaciones de que las empresas chinas que robaron secretos tecnológicos no eran razonables y dijo que no estaban basadas en hechos.
Una guerra arancelaria tit-for-tat
Las dos economías más grandes del mundo se han visto envueltas en una guerra de aranceles desde julio de 2018 por las demandas de los Estados Unidos de que la potencia asiática adopte cambios en las políticas que, entre otras cosas, protejan mejor la propiedad intelectual estadounidense y hagan que el mercado de China sea más accesible para los Estados Unidos. compañías. La expectativa de que se llegara a un acuerdo recientemente fue muy alta, pero el fin de semana pasado se abrió una profunda brecha sobre el lenguaje del acuerdo propuesto. La agencia de noticias Reuters, citando fuentes del gobierno de Estados Unidos y del sector privado, informó el miércoles que China había dado marcha atrás en casi todos los aspectos de un borrador de acuerdo comercial, amenazando con estallar las negociaciones e impulsando a Trump a ordenar el aumento de las tarifas. Washington exige que Pekín realice cambios radicales en sus prácticas comerciales y regulatorias, incluida la protección de la propiedad intelectual de Estados Unidos contra robos y transferencias forzadas a empresas chinas, restricciones a los subsidios del gobierno chino y un mayor acceso de Estados Unidos a los mercados chinos. Trump también ha buscado alzas masivas en las compras chinas de productos agrícolas, energéticos y manufacturados de EE. UU. Para reducir el enorme déficit comercial de EE. UU. Con China. FUENTE: AGENCIAS DE NOTICIAS.