Irán no quiere entrar en guerra, pero los líderes de lo que él llama "Grupo B" sí lo quieren, opina el ministro iraní de Asuntos Exteriores
El ministro de Exteriores de Irán, Mohammad Javad Zarif, asegura que no es Irán el país que promueve un conflicto armado, sino los aliados de Estados Unidos, a los que se refirió como el "Grupo B" , formado por el príncipe heredero saudita, Mohamed bin Salmán , el príncipe heredero de EAU, Mohammed bin Zayed Al Nahyan, y el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu , debido a las iniciales de sus nombres o apellidos.
El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, lo entendió al revés: no es Irán el que desea luchar hasta [que caiga] el último estadounidense, más bien, son los anfitriones de su Grupo B los que parecen desear luchar contra Irán hasta el último estadounidense", tuiteó este viernes el jefe de la diplomacia iraní.
Asimismo, Zarif subrayó que aunque su país no quiere involucrarse en una guerra, se verá obligado a hacerlo si el pueblo iraní está en peligro: "Irán no tiene ansias de guerra, pero defenderemos, como siempre hemos defendido, a nuestro pueblo y nuestra nación".
"La agresión iraní"
El ministro persa hace estas declaraciones dos días después del viaje de Pompeo a Arabia Saudita, donde se reunió con el príncipe Bin Salmán. Según se especificó en un comunicado del Departamento de Estado de EE.UU., el propósito principal del encuentro es "discutir el reciente ataque contra las instalaciones petroleras del reino y coordinar los esfuerzos para contrarrestrar la agresión iraní en la región".
Pompeo también visitó este jueves Abu Dabi, la capital de Emiratos Árabes Unidos, donde mantuvo una reunión con el jeque Bin Zayed.
"Estuve aquí en un acto de diplomacia. Mientras el ministro de Relaciones Exteriores de Irán está amenazando con 'una guerra sin cuartel' y con luchar hasta contra el último estadounidense, estamos aquí para construir una coalición destinada a lograr la paz y una solución pacífica a esto", dijo ante la prensa tras su reunión con el príncipe emiratí.
Riad presenta una evidencia "innegable", pero Teherán exige "pruebas reales"
Las autoridades sauditas rechazan la versión del Gobierno persa de que los responsables de los ataques contra sus refinerías fueron las fuerzas rebeldes hutíes de Yemen —quienes incluso asumieron la responsabilidad por los hechos—, argumentando que Yemen se ubica al sur del país, mientras que la ofensiva procedió del norte (donde se encuentra Irán).
Además, varios altos funcionarios estadounidenses anónimos aseguraron que fue por eso que los sistemas de defensa aérea de Arabia Saudita no lograron reaccionar al ataque, ya que en ese momento estaban dirigidos hacia el sur, en alerta ante una hipotética amenaza desde territorio yemení.
Por su parte, Teherán ha rechazado en numerosas ocasiones las acusaciones de que su país supuestamente tiene relación con el incendio en instalaciones petroleras de Saudi Aramco e insiste en que Washington y Riad presenten "las pruebas reales". (RT)