LA HABANA, Cuba.- Para impedir que avance el Covid-19, no se han declarado en Cuba los virtuales estados de sitio que prohíben el paso y la presencia en las calles de los habitantes de ciudades enteras, en otros lugares del mundo; mientras en terceros sitios no se toma medida de aislamiento alguna. Ni siquiera se han cerrado en la isla municipios completos aunque, de ser necesario, las autoridades no dudarían.
La decisión de declarar en cuarentena a comunidades o territorios locales conocidos administrativamente como consejos populares (primero, la comunidad Camilo Cienfuegos del municipio pinareño de Consolación del Sur –en el Occidente de la isla- y, luego, el consejo popular Carmelo del Vedado capitalino), ha sido seguida en los últimos días por la aplicación de la medida en territorios igualmente pequeños.
Por ejemplo, el miércoles se tomó la decisión para tres manzanas del municipio habanero Cerro que componen el consejo Buenos Aires, en tanto se decretaba el aislamiento reforzado para el Argentina, perteneciente al camagüeyano municipio de Florida -unos 430 Km. al Este de La habana- donde se registraron cinco casos.
Aunque el Presidente y el Consejo de Ministros, en pleno, se reúnen cada día para seguir “a punta de lápiz” la evolución de la enfermedad, las autoridades de la Defensa Civil —que es la institución cubana encargada de amparar al pueblo de agresiones pero también de desastres—, le llama cuarentena escalonada.
Su Estado Mayor se refirió a ello hace unas horas, cuando confirmó que la medida comprende la limitación y prohibición del movimiento hacia y desde las zonas afectadas, y que en ellos, como han dicho las autoridades de Salud, que ofrecen un parte y una conferencia de prensa diarios, se incrementan las pesquisas para la detección de nuevos casos, se desinfectan áreas puntuales, y se aísla y controla a sospechosos, o se les hospitaliza.
Así, la cuarentena en Cuba no se declara de modo total, sino de manera paulatina, tomando en cuenta el avance de la epidemia, y las características geográficas y sociales de la comunidad. Es una estrategia y tal vez pocos la apliquen en el mundo.
El tino y la mesura con que se adopta este tipo de decisiones -sin alarmas estrepitosas pero de manera muy previsora y atenta- expresa también la experiencia acumulada por Cuba frente a eventos de esta naturaleza.
La Defensa Civil, que nació para estas y otras contingencias después de la devastación que dejó en el Oriente cubano el ciclón Flora en 1960, y realiza un ejercicio nacional anual que incluye simulacros y enrola a la población, ya ha debido dar cara, junto a las autoridades de Salud, a epidemias nuevas para la época e introducidas mal intencionadamente en Cuba como el dengue hemorrágico a partir de 1977, y que en 1981 se llevó la vida de más de un centenar de niños, hasta que la isla, pronto, supo lidiar frente a esa enfermedad; la fiebre porcina (década de 1970) o, más recientemente, la roya del café, por sólo mencionar algunas.
Esta realidad, unida a la existencia de un Estado que centraliza el presupuesto, los servicios básicos y los recursos y puede, por tanto, decidir y hacer que esas decisiones se cumplan, ponen a Cuba en mejores condiciones de enfrentar la pandemia.
Con firmeza pero sin nervios en vano. Sin desidia, ni abandono, pero con una estrategia bien pensada donde nada, absolutamente nada se improvisa.
Datos recientes
Cuba confirmó este jueves 58 nuevos contagiados de COVID-19 y otros tres fallecidos, con lo que la isla sobrepasó los 500 positivos al virus, para un acumulado hasta la fecha de 515 casos confirmados y 15 muertes.
Las tres nuevas víctimas son de nacionalidad cubana -un hombre de 49 años y dos mujeres de 75 y 80 años- y presentaron complicaciones respiratorias agudas relacionadas con la enfermedad, precisó a la prensa el director de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (Minsap), Francisco Durán.
En hospitales de la isla hay ocho pacientes en estado crítico y ocho graves, mientras que 454 enfermos presentan una evolución clínica estable y uno fue dado de alta, con lo que suman ya 28 los recuperados.