Durante la misa de Jueves Santo, celebrada en Roma, el papa Francisco, máximo jerarca de la Iglesia Católica, hizo un llamado a los sacerdotes a ser humildes como Jesucristo y a predicar con el ejemplo.
Contrario a otros años, el sumo pontífice, ofició la ceremonia para unos 200 creyentes, cuando normalmente, los fieles que asisten a este servicio religioso de Semana Santa se cuentan por miles.
Desde el año pasado, la Semana Santa, cuando se conmemora la crucifixión de Jesús de Nazaret, cuenta con numerosas restricciones sanitarias para llevarse a cabo, debido a la actual pandemia, misma que ha costado millones de vidas y que ha obligado a países de todo el mundo a entrar en confinamiento.
Durante la ceremonia, Francisco realizó la bendición de los aceites sacramentales y presidió la renovación de votos de obispos, cardenales y de 75 sacerdotes.
Durante la homilía, el papa pidió a los sacerdotes que fueran humildes, además de que les recordó que Jesús, figura central dentro del cristianismo, siempre defendió a pecadores y marginados.
El tradicional lavatorio de pies, en el que se lavan y besan los pies de 12 personas para recordar la humildad que Cristo tuvo con sus apóstoles, no se realizó en esta ocasión por parte del pontífice.
En días pasados, el la Secretaría de Economía del Vaticano anunció la decisión de reducir el sueldo a cardenales, jefes de la Curia Romana y a clérigos de bajo rango, debido a los problemas financieros por los que atraviesa la Iglesia Católica debido a la pandemia.
De acuerdo con la información, los ingresos de la ciudad-estado cayeron en picada en 2020 debido a que las donaciones y el turismo se redujeron a niveles nunca antes vistos, lo que orilló a reducir de manera considerable el sueldo a varios clérigos. Con información de Reuters. JMCG