Este jueves, el gobierno de Israel divulgó fotografías extrañas de algunos de los bebés que fueron asesinados y quemados por el grupo islamista Hamás después de los ataques del fin de semana en los que cientos de civiles israelíes, incluyendo mujeres embarazadas, fueron asesinados en sus hogares de los kibutz (granjas colectivistas) de Beeri y Kfar Aza.
Una fotografía es completamente explícita y muestra el cuerpo diminuto de un bebé de menos de doce meses acostado sobre una bolsa blanca que ahora está ensangrentada. Después de los ataques, el bebé del niño, lleno de flores, está cubierto de sangre. Dos fotografías más difundidas por Israel muestran los cuerpos ennegrecidos y carbonizados de dos bebés que fueron asesinados por Hamás cuando irrumpieron en sus casas en el sur de Israel. Sus cuerpos están tan deformados que es difícil reconocer dónde habrían estado sus brazos y piernas.
El sábado por la mañana, Hamás atacó uno de los primeros asentamientos israelíes, el kibutz de Kfar Aza. Aquí, los terroristas mataron a familias que gritaban mientras rogaban por sus vidas a tiros despiadadamente con rifles de asalto y granadas.
El jueves, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, expresó su solidaridad con el gobierno israelí mostrándole al jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, durante su visita an Israel.
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