La agencia espacial rusa Roscosmos anunció el domingo que la nave espacial Luna-25 se había estrellado contra la superficie de la Luna después de salirse de su trayectoria programada. Este incidente representa un revés en los esfuerzos de Rusia por explorar nuestro satélite natural y demuestra los desafíos y riesgos asociados con la exploración espacial.
Según el comunicado de Roscosmos, la Luna-25 se movió a una órbita impredecible y finalmente chocó con la superficie lunar, poniendo fin a su existencia. La agencia informó que perdió el contacto con la nave el sábado mientras se preparaba para ingresar a la órbita previa al aterrizaje. Los expertos en la misión detectaron una "situación anómala" y estaban analizando los datos para determinar la causa exacta del desvío.
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Durante el lanzamiento de la nave, que tuvo lugar el 10 de agosto desde el puerto espacial ruso Vostochny, surgieron expectativas y esperanzas en Rusia de convertirse en una potencia espacial nuevamente, demostrando su capacidad para llevar cargas útiles a la Luna. Sin embargo, este incidente demuestra que la exploración espacial está llena de desafíos y que los resultados no siempre son los esperados.
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LG