El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, llegó el miércoles 26 de junio de 2024 a Canberra, Australia, tras pasar casi 14 años en detención arbitraria en el Reino Unido, incluyendo cinco años en una prisión de máxima seguridad.
Assange aterrizó en el aeropuerto internacional de Canberra alrededor de las 19:40 hora local en el vuelo chárter VJT199.
Noticia destacada
Juez estadounidense otorga libertad a Julian Assange tras 14 años de batalla legal
WikiLeaks anunció su regreso a casa en Australia a través de su cuenta de X:
"Tras casi 14 años de detención arbitraria en Reino Unido y 5 años en una prisión de máxima seguridad por su trabajo innovador, Julian Assange ha regresado a casa en Australia."
Recepción en Canberra
Assange fue recibido en el aeropuerto por su esposa, Stella Assange, y sus dos hijos.
Aunque inicialmente se esperaba que ofreciera una rueda de prensa en un hotel de la capital australiana, finalmente fue Stella quien compareció ante los medios.
Explicó que su marido "necesita tiempo y recuperación" para "acostumbrarse a la libertad" después de su largo período de encarcelamiento.
Stella Assange pidió "espacio y privacidad" para su esposo antes de que decida "hablar de nuevo". "Julian quería estar aquí hoy, pero me ha pedido que lo haga yo. Tienen que entender por lo que ha pasado. Necesita tiempo, necesita recuperarse y esto es un proceso," afirmó Stella Assange.
Una llegada anticipada por muchos
En el aeropuerto de Canberra, alrededor de un centenar de periodistas se habían reunido para documentar el regreso de Assange a su Australia natal.
El viaje desde Londres incluyó una parada técnica en Bangkok el martes, seguida de una escala en las Islas Marianas del Norte, un territorio estadounidense en el Pacífico, donde se formalizó su libertad.
El regreso de Assange a Australia marca el final de un largo y controvertido capítulo en su vida, que comenzó con su detención en el Reino Unido por su papel en la publicación de documentos clasificados a través de WikiLeaks.
Su liberación ha sido un tema de interés mundial, y su retorno a Australia está siendo seguido de cerca tanto por partidarios como por críticos.
Assange, que ha sido una figura polarizadora en el ámbito del periodismo y la transparencia gubernamental, enfrenta ahora el desafío de reintegrarse a la vida cotidiana después de años de encarcelamiento y lucha legal.
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