El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, calificó el asesinato de Hasán Nasrallah, líder de Hezbolá, como "una medida de justicia" por las miles de víctimas civiles en Medio Oriente, incluidos estadounidenses, israelíes y libaneses. El ataque aéreo, llevado a cabo por el ejército israelí en los suburbios del sur de Beirut, fue confirmado por el propio grupo Hezbolá el viernes 27 de septiembre de 2024.
Biden, en un comunicado emitido el sábado, expresó su total apoyo al derecho de Israel a defenderse de organizaciones terroristas como Hezbolá, Hamás y los hutíes, todos respaldados por Irán.
Además, anunció que ha ordenado al secretario de Defensa mejorar la postura militar estadounidense en la región para prevenir una posible escalada del conflicto. "Estados Unidos apoyará a Israel en la defensa contra cualquier grupo terrorista que amenace su seguridad", afirmó el mandatario.
Kamala Harris: "Nasrallah era un terrorista"
La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, también se pronunció sobre la muerte del líder de Hezbolá, afirmando que Nasrallah era un terrorista responsable de la muerte de civiles en Medio Oriente y más allá. Harris destacó el compromiso inquebrantable de su país con la seguridad de Israel, reiterando el derecho de esa nación a defenderse contra cualquier amenaza respaldada por Irán.
Harris también subrayó la relevancia de eliminar a Nasralá, quien dirigió al grupo armado durante más de tres décadas, en las que, según ella, desestabilizó la región y promovió actos de violencia.
EU ordena evacuación de Líbano
En medio de la creciente tensión en Líbano, el Departamento de Estado de Estados Unidos ordenó la evacuación de las familias de sus diplomáticos en Beirut. La decisión se tomó debido a la "volátil e impredecible situación de seguridad" en la ciudad tras el ataque. El gobierno estadounidense también aconsejó a sus ciudadanos abandonar el país mientras existan vuelos comerciales disponibles.
El gobierno libanés, por su parte, declaró tres días de duelo nacional en memoria de Hasán Nasrallah, del 30 de septiembre al 2 de octubre, y condenó la "pérfida agresión israelí" que causó su muerte. La muerte de Nasralá, un líder clave de Hezbolá, aumenta la incertidumbre en una región ya marcada por años de conflicto y tensiones religiosas.
Con estos movimientos, se intensifica la tensión en el Medio Oriente, donde Estados Unidos ha desplegado esfuerzos para mantener su presencia y evitar un conflicto regional mayor.
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