China reafirmó este jueves su determinación de enfrentar la guerra comercial con Estados Unidos "hasta el final", en respuesta a la decisión del presidente Donald Trump de imponer nuevos aranceles a todas las importaciones chinas.
El ministro de Comercio, Wang Wentao, alertó sobre las consecuencias globales de estas medidas, señalando que los aranceles estadounidenses afectan la estabilidad de las cadenas de suministro e industriales, poniendo en riesgo el crecimiento de la economía mundial.
Durante su participación en las "Dos Sesiones", encuentros políticos de alto nivel en Beijing, Wang enfatizó que si Washington mantiene esta política, China responderá con firmeza.
China apuesta por el crecimiento interno
A pesar del panorama adverso, el gobierno chino estableció una meta de crecimiento del 5 por ciento para este año, confiando en la expansión de la demanda interna como motor económico.
Zheng Shanjie, presidente de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, reconoció los desafíos que enfrenta el país, incluyendo la incertidumbre global y la baja demanda interna.
No obstante, aseguró que China tiene las herramientas necesarias para alcanzar su objetivo de crecimiento.
Medidas económicas ante la presión comercial
En un esfuerzo por fortalecer la economía, el presidente del banco central, Pan Gongsheng, anunció que China reducirá las tasas de interés y el coeficiente de reservas obligatorias en 2025, con el fin de estimular la actividad financiera.
Paralelamente, el ministro de Finanzas, Lan Fo'an, adelantó un aumento en el gasto fiscal para promover un desarrollo económico sostenible.
La tensión comercial con Estados Unidos y las medidas económicas anunciadas por el gobierno chino serán factores clave para el desempeño económico del país en los próximos meses.
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