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CIUDAD DE MÉXICO, 2 de noviembre (AFP).- Varios migrantes centroamericanos cruzaron este viernes a pie y nadando el río Suchiate, que separa a México y Guatemala, en su intento de continuar su travesía hacia Estados Unidos.
Los migrantes, en su mayoría salvadoreños, caminaron unos tres kilómetros río arriba para cruzar a suelo mexicano.
La Policía Federal y agentes de migración también se desplegaron pero muchos de los migrantes ya habían cruzado.
Los centroamericanos transitan por un camino de terracería que les permita llegar a una carretera para salir a la ciudad de Tapachula.
Previamente, los cerca de 2,000 migrantes de este grupo se habían acercado al puente internacional Rodolfo Robles para cruzar a México pero cientos de agentes federales les impidieron el paso.
Los uniformados les dijeron que la única forma de ingresar al país es de forma ordenada y documentada, llenando formatos para solicitar refugio, el cual sería valorado, pero la mayoría de ellos rechazó la propuesta.
Cambio de ruta
Mientras tanto, migrantes de la primera caravana migrante, de mayoría hondureña, se dirigieron este viernes a Veracruz en lugar de permanecer en Donají, una comunidad del municipio de Matías Romero, en el sureño estado de Oaxaca.
Se espera que lleguen al municipio de Acayucan, en Veracruz, un estado en el este del país donde opera el crimen organizado.
La caravana, que partió el 13 de octubre de Honduras, se dirige a Ciudad de México donde sus integrantes pedirán al gobierno documentos para poder transitar hasta la frontera con Estados Unidos.
El jueves, el grupo decidió llegar a la capital a través de Veracruz.
Originalmente, buscaban salir del municipio de Juchitán en Oaxaca, rumbo a Ciudad de México, sin embargo, es peligroso hacer ese trayecto caminando.
Los cerca de 2,000 integrantes de la segunda caravana que cruzó a México el lunes, partieron este viernes de la localidad de Huixtla, en el sureño estado de Chiapas, y algunos de ellos ya llegaron al poblado de Mapastepec.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha amenazado con movilizar hasta 15,000 efectivos a la frontera con México para impedir el paso a los migrantes.
Los salvadoreños, siguiendo los pasos de miles de hondureños que recorren el sur de México, cruzaron a pie el río entre Tecún Umán, en Guatemala, y Ciudad Hidalgo, México, al rechazar el ofrecimiento de asilo o retorno que les plantearon las autoridades mexicanas.
Unas escasas familias salvadoreñas que decidieron aceptar el asilo quedaron en el extremo mexicano del puente fronterizo, por lo que debieron abordar un autobús.
Cargando sus pertenencias sobre la espalda y algunos con niños en los brazos, los salvadoreños pasaron el río Suchiate después de las caravanas masivas de hondureños que en los últimos días atravesaron el mismo lugar en su intento por llegar a Estados Unidos, huyendo de la violencia y la pobreza.
La primera caravana que desató la oleada migratoria salió el pasado 13 de octubre de la ciudad de San Pedro Sula, norte de Honduras y actualmente pasan por el Estado sureño mexicano de Oaxaca, mientras que otros 2,000 que pasaron a México el lunes los siguen a la distancia.
La Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) de El Salvador cifró en 1,778 los migrantes salvadoreños que salieron el miércoles del país en dos caravanas.
Un total de 268 personas (118 adultos y 150 niños y adolescentes) decidieron regresar a El Salvador.
El pasado domingo salieron 534 personas, en su mayoría adultos, quienes ya se encuentran en territorio mexicano.
Los migrantes de El Salvador decidieron ir en busca del anhelado “sueño americano”, a pesar de la severa advertencia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de contener la masiva migración hasta con el Ejército.