COATZACOALCOS, Ver., 19 de diciembre (Sayda Chiñas Córdova, corresponsal de POR ESTO!).- Los alcaldes del sur de Veracruz nuevamente realizaron una rueda de prensa para exigir la renuncia del fiscal General del estado de Veracruz, Jorge Winckler, por su mal desempeño en la dependencia, en sus dos años de administración
La alcaldesa de Moloacan, Victoria Rasgado Pérez, hizo un recuento de los malos resultados que ha tenido la dependencia, principalmente en la investigación de casos de delitos de alto impacto, como el secuestro.
Indicó que de acuerdo con los datos que se tienen, de cada 10 víctimas de delitos, solo cuatro son atendidas y de estas probablemente solo una tendrá justicia.
Tras recitar un rosario de problemas dentro de la fiscalía indicó que otra de las cosas que también han afectado en el acceso a la justicia, es la desaparición de fiscalías en algunos municipios, por lo que muchas víctimas de los delitos, tienen que salir de su municipio para interponer una denuncia.
Anotó que muchos de los ciudadanos que fueron víctima de los delitos prefieren no denunciar, por eso la cifra negra se ha disparado de “manera escandalosa”.
Refirió que se “barrieron” con las fiscalías municipales en varias localidades de Veracruz, y solo en esta región sur se alejó de la posibilidad de justicia a casi 450 mil habitantes, principalmente en zonas de mediana y alta marginación
Además, señalaron que dentro de la Fiscalía ha existido una mala integración en las carpetas de investigación y se han destinado casi todos los recursos en la persecución de exfuncionarios del gobierno de Javier Duarte de Ochoa.
Fraude en la Fiscalía
En la misma rueda de prensa, se presentó al señor Marcos Josafat Grajeda Hernández, padre del joven desaparecido Baruch Grajeda García, dio a conocer que el fiscal falseó información sobre la aparición de cuerpo de su hijo, en el predio de Arbolillo, solo con el fin de mostrar su eficiencia en el trabajo.
Detalló que su hijo fue privado de su libertad el pasado 11 de julio del 2016 por policías, quienes entraron en su domicilio de la colonia Zaragoza de Veracruz, y durante más de un año no se movió el expediente, ni los citaron a declarar, por eso tuvieron que promover un expediente.
Expuso que en enero del 2018, se encontró una credencial de su hijo en una fosa en Alvarado y de manera irregular lo presentaron como aparecido; sin embargo, el cuerpo no fue identificado, ni mucho menos entregado.
Refirió que tanto el fiscal Jorge Winckler, como el exgobernador Miguel Ángel Yunes, dieron información falsa sobre las fosas de Arbolillo, lo cual no solo representa un engaño para los ciudadanos, sino también una atentado contra ellos como víctimas.