XALAPA, Veracruz, 8 de diciembre (LA JORNADA/AFP).- La mañana de este sábado, personas armadas atacaron a un grupo de migrantes que transitaba por la Zona Sur de Veracruz
La agresión dejó un saldo de una persona muerta, y tres heridas, entre las que se encuentra un menor de edad.
Los primeros reportes policiacos identificaron a la persona fallecida como: María Herlinda Ruiz Tapería. Mientras que entre los heridos se encuentran: Keren Paola Barco Benavides, 31 años; Yoel Méndez Barco, de 3 años, y Hamilton Gedanias Soicoi, de 26 años.
Los migrantes son originarios de Guatemala, viajaban a bordo de un camión de ganado, que habían salido de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, y que pretendía llevarlos hasta el Norte del país.
Fue durante su tránsito por el Sur de la Entidad que sufrieron una agresión por personas encapuchadas con alarmas largas.
El grupo fue atacado a tiros por hombres armados que iban en un vehículo con el rótulo de Policía, lo que dejó a la mujer muerta y tres heridos, entre ellos un niño de tres años.
El camión fue interceptado en el municipio de Juan Rodríguez Clara, a unos 500 kilómetros de la Ciudad de México.
En ese lugar, el camión fue atacado a balazos por “personas vestidas de negro, encapuchadas, que portaban armas largas y que traían un vehículo rotulado de Policía”, según un informe de las autoridades al que la AFP tuvo acceso.
Una sobreviviente del ataque, que habló bajo anonimato con la AFP, dijo que cuando los policías se dieron cuenta de que en el camión viajaban migrantes “nos bajaron y posteriormente se marcharon y ahí nos abandonaron”.
El Gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, calificó el ataque como “desmedido” y ordenó la atención a los sobrevivientes.
Muchos migrantes centroamericanos son objetivo de agresiones de las autoridades mexicanas y de grupos del Crimen Organizado en su paso por México rumbo a Estados Unidos.
El fenómeno de la migración acaparó la atención este año por una caravana que desde octubre recorrió más de 4,000 km desde San Pedro Sula, Honduras, con el objetivo de llegar a Estados Unidos, donde buscan pedir asilo y construir una vida lejos de la pobreza y violencia de Centroamérica.
Cientos de ellos solicitaron su repatriación y más de 2,000 han empezado a regularizar su estancia en México para instalarse definitivamente.
La caravana, que llegó a sumar unas 7,000 personas, ha empezado a disolverse.
Unos 2,000 migrantes se encuentran en un nuevo albergue de Tijuana, frontera con San Diego, instalado para recibirlos a finales de noviembre.