México

CIUDAD DE MEXICO, 21 de enero (AFP).- El periodista Rafael Murúa se convirtió en el primer periodista en ser asesinado en el 2019 México, uno de los países más peligrosos para la prensa, tras haber recibido amenazas.

Murúa, de 34 años, era director de una radio comunitaria en la región norte del Estado de Baja California Sur, y había sido reportado como desaparecido hasta la tarde del domingo cuando apareció muerto, según versiones de la prensa local.

“Condeno el asesinato del periodista sudcaliforniano Rafael Murúa Manríquez. Mi solidaridad con su familia y el gremio periodístico sudcaliforniano”, escribió en Twitter el Gobernador del Estado, Carlos Mendoza.

“El cobarde crimen de Rafael Murúa no quedará sin castigo”, agregó el gobernador al señalar que instruyó a la fiscalía a seguir todas las líneas de investigación para esclarecer el crimen.

Amenazas

De acuerdo con un diario, el periodista había denunciado hostigamiento y amenazas. El periódico agregó que la última vez que fue visto estaba caminando el sábado por la noche en la localidad de Santa Rosalía, en el municipio de Mulegé.

Balbina Flores, representante en México de Reporteros Sin Fronteras, dijo que Murúa estaba bajo la custodia del organismo de protección del gobierno para periodistas y defensores de Derechos Humanos.

“Lo que sabemos y pudimos confirmar ayer es que estaba incorporado al mecanismo de protección desde junio del 2017 por amenazas del alcalde de ahí de su municipio (Mulegé)”, dijo Flores a la AFP.

“Sí estamos seguros que las medidas de seguridad que traía sólo eran el botón de pánico”, agregó.

Artículo 19, una ONG defensora de la libertad de expresión, también lamentó el asesinato del comunicador.

“Esta organización continúa documentando los hechos. Para su familia y compañeros, solidaridad en estos momentos difíciles”, escribió en Twitter.

México es el segundo país más peligroso del mundo para ejercer el periodismo después de Siria y Afganistán, con más de 100 comunicadores asesinados desde el 2000, según Reporteros Sin Fronteras.

En el 2018, 10 comunicadores fueron abatidos en diversas partes del país. La gran mayoría de esos homicidios permanecen impunes.