CIUDAD DE MEXICO, 27 de octubre (Infobae).- “La Catrina”, el personaje creado por el artista mexicano José Guadalupe Posada, fue la principal protagonista del Internacional Desfile del Día de Muertos 2019 que se celebró este domingo 27 de octubre en la Ciudad de México (CdMx).
Con el título “Un regalo de cantos y flores de México para el mundo”, los personajes que desfilaron en la Ciudad de México ya recorrieron las ciudades de Rusia, París, Londres, Berlín, Nueva York, Toronto, Montreal y Chicago. Es la cuarta edición de un evento tradicional, en el que participan carros alegóricos y marionetas, llenos de color, luces y movimiento.
El evento estuvo marcado por el entusiasmo de los asistentes y por una copiosa lluvia que nunca hizo decaer el ambiente de esta fiesta tradicional. Aunque el ambiente fue festivo, hubo transeúntes y automovilistas que se quejaron del caos vial provocado. Las autoridades no consideraron un solo paso peatonal durante todo el trayecto.
Saldo blanco reportaron las autoridades al concluir el desfile, el cual inició en el Zócalo capitalino y continuó por la emblemática avenida de Paseo de la Reforma, hasta llegar a la Estela de Luz.
Más de 2.6 millones de personas se dieron cita en la ruta del desfile. El evento estuvo resguardado por 4,000 elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, quienes estuvieron desplegados a lo largo del recorrido para salvaguardar la integridad de los asistentes.
Después de una intensa lluvia culminó el desfile internacional del Día de Muertos en la Ciudad de México, que tuvo como destino la Estela de Luz, en Paseo de la Reforma.
El primer contingente del desfile del Día de Muertos llegó a la glorieta del Ángel de la Independencia, justo cuando empezaron a caer las primeras gotas de lluvia en la capital del país.
Cientos de personas se congregaron en las inmediaciones del Ángel de la Independencia. Mientras esperaban el desfile de catrinas y figuras tradicionales, los asistentes disfrutaron de algodones de azúcar y pintaron sus rostros con los tradicionales diseños de “La Catrina”.
Se registran algunos incidentes sin importancia. Mujeres discuten y se empujan, buscan los mejores lugares para apreciar el desfile. La mayoría toma las cosas con calma, se acomodan y protegen a los pequeños que los acompañan.
El primer carro alegórico llegó a la calle de 5 de Mayo. Una enorme calavera blanca lució una corona de flores de cempasúchil y una pluma morada. Detrás de ella, un grupo de jóvenes exhibía las banderas de diferentes países; Brasil y España encabezaron la procesión.
El desfile es un recorrido por el Mictlán, “sincretismo, arte, cultura y celebración que engloba el Día de muertos”.
Durante el desfile también participaron alebrijes. Un enorme perro con graciosos movimientos en sus extremidades fue la atracción principal de las niñas y niños asistentes.
El carro alegórico de “Los Novios” fue uno de los más exitosos del desfile. Con cámaras de video y celulares, los asistentes grabaron el paso de dos calaveras gigantes que lucían el vestido perfecto para su boda.
Catrinas, flores de cempasúchil y calaveras monumentales son los personajes presentes en casi todos los carros alegóricos que tanto residentes mexicanos, como visitantes extranjeros disfrutaron con gritos, aplausos y otras manifestaciones de alegría.
El blanco fue el color predominante del desfile. Los detalles amarillos y rojos destacaron en los trajes, vestidos y decorados de los participantes.
Como era de esperarse, Frida Kahlo también estuvo presente. La imagen de la pintora mexicana, que ha causado furor en varios países del mundo, participó junto a varias mujeres con el disfraz de “La Catrina”.
La Banda Legal fue una de las agrupaciones que mayor empatía consiguió con el público. Manuel Nordahl y el resto de los integrantes del conjunto no sólo disfrutaron el desfile, sino que interactuaron directamente con los asistentes.
El turibus fue el último en pasar, con “Las calacas de las novias”. Los trabajadores del sistema de limpia de la Ciudad de México recibieron largas ovaciones de los asistentes, ya que durante su participación en el desfile utilizaron sus escobas para seguir el ritmo de la música.