A partir de 2020 los proyectos tendrán que acercarse a colonos; será para desarrollos arriba de 5 mil metros cuadrados: Sedema
A partir de 2020, en la Ciudad de México los desarrolladores de grandes construcciones tendrán que enfrentarse a un proceso de consulta ciudadana previo a que reciban cualquier permiso de impacto urbano y ambiental, con el objetivo de obtener la opinión y decisión de los habitantes del área impactada.
La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, comentó que con este proceso se busca que no haya otro gran desarrollo inmobiliario donde no se pregunte a los vecinos en la Ciudad de México, como ocurrió en el caso de la Torre Mítikah.
Destacó que con esta herramienta se generarán acuerdos entre el desarrollador y los residentes, donde se va a instalar o se quiere construir ese desarrollo, y también generará certeza jurídica al desarrollador.
“A veces, en la administración pasada se daban autorizaciones, había un conflicto vecinal, inclusive había desarrolladores que ya tenían créditos y que no podían desarrollarlos por los conflictos vecinales... Es un proceso de acuerdos y hasta que no haya un acuerdo final con la ciudadanía, no se hace la autorización y, obviamente, tiene que haber encuestas y otros mecanismos de tal manera que si es una minoría la que no permite que se desarrollen, pues que se conozca realmente la opinión de las mayorías para poder hacer estos desarrollos”, dijo.
Normas La secretaria de Medio Ambiente local, Marina Robles, comentó que estarán sujetas a un proceso de esta naturaleza aquellos proyectos que tienen un polígono de actuación y fusión de predios a partir de los 5 mil metros cuadrados o bien, construcciones en una superficie de terreno a partir de 5 mil metros cuadrados, construcciones a partir de 100 mil metros cuadrados, proyectos que impliquen centros comerciales, de espectáculos o similares, o aquellos proyectos en los que se presente algún conflicto vecinal. Explicó que el proceso tendrá varias etapas; la primera será cuando se ingrese el proyecto al Gobierno y de inmediato se pondrá en un sitio web y en módulos informativos cercanos al proyecto.
Además de que el propio desarrollador lo publicará en un medio de difusión de amplia circulación donde se establecerían las fechas, los horarios y los sitios en los cuales se realizarán las actividades de este proceso de consulta. “El primer momento de este proceso implica una serie de reuniones y de talleres con las vecinas y vecinos de la zona y también un proceso de encuesta para recuperar las opiniones, preocupaciones y también las solicitudes y propuestas, comentarios y ajustes posibles al proyecto.
“Si hubiese una construcción de acuerdos en esta primera etapa, el proyecto sigue su curso, de manera que pueda reunirse con el resto de las evaluaciones que se están haciendo de manera paralela de impacto ambiental y urbano”, dijo. En caso de que no hubiera una construcción de acuerdos con los vecinos, se seguirá con una siguiente etapa con más reuniones, además de hacerse entrevistas a profundidad, de manera que se establezcan los acuerdos.
“Si hay efectivamente acuerdos en este momento, nuevamente se va a continuar con el proceso de autorización; en caso de que no suceda, hay una tercera etapa en donde hay otra vez foros y nuevas reuniones para buscar acuerdos. “Si en este momento del proceso hay construcción de acuerdos, se puede entonces llegar a una autorización. Si no hubiese acuerdo pleno de las condiciones del proyecto, se reinicia el procedimiento hasta que pueda haber una construcción de acuerdos”, detalló la funcionaria.
Proyectos
Sheinbaum Pardo dijo que en este momento hay 15 grandes desarrollos en la Ciudad en donde están pendientes algunas autorizaciones y podrían entrar en este proceso de consulta pública. “Como se planteó, son grandes desarrollos, estamos hablando de torres en Reforma de más de 30, 40 pisos en donde ya tenían su polígono de actuación, pero van a iniciar apenas su trabajo, inclusive algunos ya tenían también su autorización de impacto urbano, pero están en proceso de autorización de impacto ambiental”, refirió.
Recordó que al inicio de su administración se cerró la ventanilla única por casos de corrupción en el gobierno pasado, lo que fue un factor para la baja en la industria constructora, pero se busca que mejore el sector a partir de la edificación de los 12 corredores donde se combina vivienda social, media y de altos ingresos. “La disminución de la construcción este año tuvo que ver con muchas otras cosas, inclusive una reducción en la demanda que se presentó durante este año.
El próximo año queremos que haya más construcciones, pero que estén sustentadas en la opinión vecinal... lo que no puede seguir ocurriendo es este proceso donde lo único que se construye son vivienda de más de 5 millones de pesos, porque lo único que hacen es expulsar a la zona metropolitana”, puntualizó. (El Universal)