CIUDAD DE MEXICO, 5 de marzo (La Política Online).- La semana pasada se concretó una cena importante para la nueva constelación mediática de México. Con un Ricardo Salinas Pliego como aliado clave desde la campaña, y una relación muy amistosa con Emilio Azcárraga, la 4T sólo necesitaba del medio impreso más tradicional del país para cerrar ese círculo.
El vínculo con El Universal, que en medio de la campaña estaba completamente detonado, comienza a ver una luz al final del túnel. Juan Francisco Ealy Ortiz encabezó una de sus elegantes cenas de cabildeo, en donde se reúnen destacados políticos y empresarios. Esta vez, la invitada de honor fue nada menos que Olga Sánchez Cordero. También estuvo Cecilia Barbara Morfín, en representación de su esposo Esteban Moctezuma.
Olga Sánchez se sentó junto a Ealy Ortiz y a su hijo, en un gesto elocuente de acercamiento. Hay que recordar que en los años previos a la elección, e incluso durante la campaña, El Universal fue el arma mediática de fuego de Enrique Peña Nieto y su candidato José Antonio Meade. Quizás la operación de Eva Cadena sea la más recordada por el entorno de AMLO.
Los cortocircuitos se agravaron cuando -ante la inminente publicación de la Ley Federal de Remuneración de Servidores Públicos, promovida por AMLO- el Gobierno de Enrique Peña Nieto decidió retirar escoltas a diversas personalidades. Uno de los afectados habría sido el propio Ealy Ortiz. Por eso salió de frente a cuestionar los beneficios de Televisa y TV Azteca.