URSULO GALVAN, Veracruz, 20 de abril (SDP Noticias).- Aproximadamente a 5 kilómetros de las playas más concurridas de Veracruz: Chachalacas, Playa Juan Ángel y Paso Doña Juana, autoridades estatales estiman que fueron enterradas más de 50 personas en 37 fosas clandestinas.
La zona mide cerca de 7 hectáreas y se localiza entre las comunidades Paraíso y Porvenir, del municipio de Úrsulo Galván, donde suponen que organizaciones delincuenciales, Cartel Jalisco Nueva Generación y Los Zetas, enterraron a sus víctimas.
El día de ayer, el Fiscal General de Veracruz, Jorge Winckler Ortiz, dio a conocer el hallazgo de estos terrenos con cuerpos enterrados, justo un día antes de la visita que el fin de semana realizará el Presidente Andrés Manuel López Obrador al Estado.
De acuerdo con Winkler, el lugar se encuentra bajo reserva de policías ministeriales y personal del Servicio Médico Forense hasta que comiencen las diligencias correspondientes. Sin embargo, medios locales reportaron que el sitio criminal se encuentra sin resguardo ni diligencias por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE).
La zona dividida en 14 cuadrantes está rodeada de cinta amarilla que colocó la Fiscalía para posteriormente se realice la exhumación de los restos óseos pues se estima que en cada fosa los cuerpos fueron enterrados a una profundidad de medio y un metro.
En esta región se han denunciado desapariciones masivas sin ninguna respuesta por parte de las autoridades desde el 2013 cuando 8 policías municipales fueron desaparecidos, y hasta el día de hoy se desconoce su paradero.
Las fosas clandestinas en el municipio de Úrsulo Galván son las primeras halladas en el gobierno Cuitláhuac García. En el sexenio del priista Javier Duarte fueron localizadas 65, pero las autoridades sólo reconocieron 9.
Durante los 2 años del panista Miguel Ángel Yunes Linares se potenció el hallazgo de las fosas: Arbolillo (244 osamentas halladas), Colinas de Santa Fe (305 cráneos y 21 mil fragmentos óseos) y Cerro de “Los Sótanos” en Río Blanco.
Sobre las fosas de Paraíso y Porvenir, el fiscal advirtió que los trabajos de exhumación podrían llevarse varios meses, incluso un año.