CUERNAVACA, Morelos, 9 de mayo (El Diario de Morelos y la Opinión de Morelos).- Fuentes de la Comisión Estatal de Seguridad (CES) dieron a conocer que Maximiliano “N”, de 22 años, autor material del ataque armado ocurrido ayer en Cuernavaca, que dejó 2 muertos y 2 heridos, recibió 5 mil pesos por la encomienda.
Las fuentes señalan, de acuerdo con el rotativo nacional, que al atacante se le encontró un celular Nokia, en el cual se hallaron conversaciones mediante mensajes de texto con la orden de matar a Jesús García y a Roberto Castrejón, por quienes le habrían pagado 5 mil pesos.
Lo confirma AMLO
La anterior versión fue ratificada por el presidente Andrés Manuel López Obrador en su conferencia matutina.
“El que asesina es un joven por una cantidad de muy poco monto, 5 mil pesos, según las investigaciones, fíjense a lo que llegamos por abandonar a los jóvenes”, señaló el mandatario, luego cuestionó a los gobiernos anteriores, “¿Qué hicieron? Sólo llamarles ninis”.
Señaló que una de las hipótesis de la investigación indica que uno de los grupos que participaron en la marcha habría contratado al agresor.
Apoyo total a periodista herido
Por instrucciones del secretario de Gobierno, Pablo Ojeda Cárdenas, se dio total apoyo y acompañamiento permanente al periodista René Pérez Argüello, quien resultó herido en los lamentables hechos suscitados la mañana de ayer en Cuernavaca.
El subsecretario de Gobierno, José de Jesús Guízar Nájera, el Coordinador de Asesores del Secretario de Gobierno, Mauricio Robles Cortés, la directora general de Derechos Humanos, Lucero Benítez Villaseñor y el director general de Gobierno, Mauricio Termignoni Apodaca, gestionaron su incorporación inmediata al Mecanismo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas de la Secretaría de Gobernación (Segob).
“Declaración de guerra”
“Vivimos una situación grave, en una cultura del sicariato”, afirmó Josefina Solís Alcántara, catedrática de la licenciatura en Seguridad Ciudadana de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), al referirse a los hechos de violencia registrados ayer en el centro de Cuernavaca, los cuales pueden ser interpretados, dijo, como “declaración de guerra por parte de la delincuencia organizada”.
“Estamos en una cultura del sicariato, pues ya se sabe que se paga por cometer este tipo de actos; el homicidio es una situación muy grave. Que lo haga a plena luz del día, sirve para intimidar, es como para decir, ‘cuidado véanme, también le puede pasar a ustedes si no se someten; vean lo que puede suceder’, se trata de asustar a las personas y crear pánico. De decir ‘aquí estoy, existimos’; pues parece un acto de la delincuencia organizada, es una especie de declaración de guerra”.
Al preguntar sobre el perfil psicológico de un homicida, Josefina Solís, explicó que desde la psicología, tiene que ver con un trastorno antisocial de la personalidad, y el que padece esta patología tiene como síntomas que no respeta las autoridades, no respeta reglas, no siente el dolor, es un trastorno de personalidad muy severo.
“Son hombres principalmente los que transgreden las reglas y la autoridad, no tienen conciencia de cuándo cometen esta barbarie, no sienten pena ni dolor, en su infancia fueron agredidos. Una vez cometido un asesinato ya no paran y puede ser que esté bajo los efectos de un enervante o una droga estimulante para darse valor y poder ejecutar este tipo de delitos, es una psicopatología muy severa, no le interesa si hay o no gente, tiene la función de ir atacar y asesinar”.
Solís Alcántara comentó que existen daños colaterales, pues los más afectados en este tipo de eventualidades son personas que no tienen nada que ver con los problemas de violencia y pueden recibir una de las balas que se dispararon ayer, “es una violencia estructural, que no es nada más en Cuernavaca sino en todo el estado”.
Respecto de quienes fueron testigos del homicidio de ayer por la mañana, la especialista recomendó buscar terapia debido a que vivieron escenas de pánico y terror, lo que puede generar estrés postraumático y esa escena violenta la pueden estar reviviendo, con problemas para dormir, vivir con temor de salir a la calle y en general síntomas de ansiedad.
“Este evento fue en pleno día, nadie espera que esto suceda a estas horas y lo que se recomienda es tirarse al suelo y esperar que vengan las autoridades a auxiliar porque la expresión de pánico, los gritos, generan más pánico, debemos tener una cultura de seguridad y cuando ya pase la balacera solicitar auxilio. Desde la seguridad ciudadana se recomienda no ir en la calle distraído con el teléfono, ir alertas, tener mucho cuidado, caminar de forma erguida segura, y estar alerta al entorno”, dijo la catedrática de la UAEM.