La mujer de 43 años de edad, originaria de Veracruz, tenía la custodia de Teresita, sin embargo, la quemaba con cigarros y golpeaba de forma frecuente de acuerdo con los testimonios de habitantes del barrio en el que vivían, ubicado en el Valle de Toluca.
Estado de México, 3 de agosto (SinEmbargo).- Elvira, la abuela que por años torturó a su nieta de nueve años de edad hasta asesinarla en la colonia de Santiaguito Coaxustenco, en Tenango Del Valle, en el Estado de México fue detenida este sábado, cinco días después de haber cometido el crimen.
La mujer de 43 años de edad, originaria de Veracruz, tenía la custodia de Teresita, sin embargo, la quemaba con cigarros y golpeaba de forma frecuente de acuerdo con los testimonios de habitantes del barrio en el que vivían, ubicado en el Valle de Toluca.
La noche del pasado domingo, Elvira asfixió a la pequeña en la casa que rentaban, ubicada sobre la calle de Hortelanos, después envió un mensaje diciendo que había matado a la pequeña y huyó.
El caso indignó a habitantes no solo del Estado de México sino de todo el país, al conocer la historia de violencia que la menor vivió por años; este sábado, las autoridades estatales dieron a conocer su captura.
A través de redes sociales, habitantes iniciaron una campaña de búsqueda de la mujer a quien identificaron como la responsable del feminicidio, además, se organizaron para realizar el sepelio de Teresita.
Personal de la Fiscalía General de Justicia mexiquense ingresaron a Elvira, quien también se hacía llamar Laura, al penal de Almoloya de Juárez para que un juez determine su situación jurídica en las próximas horas.
AÑOS DE ABUSO
El pueblo de Santiaguito Coaxustenco en Tenango del Valle, Estado de México, despidió ayer Teresita, una niña de 10 años quien presuntamente fue asesinada por su abuela el domingo por la noche.
De acuerdo con familiares de la víctima, la abuela mandó un mensaje por celular a la mamá de Teresita para decirle: “Discúlpame acabo de matar a tu hija” y después habría huido.
La inocencia de la menor de edad fue cambiada por violencia, era víctima de maltrato infantil. Su abuela la golpeó durante años, las cicatrices por quemaduras de cigarros tatuaron su piel, era común verla vestida con chamarra, bufanda y gorro, las prendas cubrían los moretones de su cuerpo todo el tiempo.
“Ya te pegó de vuelta verdad, tienes la cara y cuerpo muy marcado”, era frecuente que Chayito, quien se ofreció a prestar su casa para ser poder velarla, le preguntara cuando la niña llegaba a salir a la calle o visitaba para que le diera algún alimento o chicharrones que vende.
“Tenía marcas en el cuello, terminó por asfixiarla, una vez la quemó con agua hirviendo”, narró Irene a A Fondo Edomex, las mujeres se sienten culpables por no haber podido salvarla, aunque advierten que el caso fue denunciado ante el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia del municipio.
Sin embargo, nunca se hizo gran cosa por quitarle la custodia a Elvira, quien para evitar que la gente se percatara de la forma en que violentaba a la menor de edad cubrió el enrejado del patio de la casa que rentaba con plástico, además, amenazó que en caso de denunciarla no se la acabarían.
El pasado domingo, el cuerpo de la niña fue encontrado sobre un sillón cubierto con un cobertor, presentaba huellas de violencia. La abuela de la menor de edad escapó y actualmente se encuentra prófuga al ser señalada como la presunta responsable del asesinato que ha consternado a sus vecinos.
LA ABUELA ANUNCIÓ EL CRIMEN
La noche del 28 de julio la abuela, señalada como presunta responsable del crimen, envió un mensaje a su hija para pedirle que fuera al domicilio ubicado en la calle Hortelanos, en la colonia Santiaguito Cuaxustenco, a unos 30 kilómetros de la capital del Estado de México; habría abandonado sin vida a Teresita.
Al lugar llegaron patrullas y unidades de emergencia, lugareños sospecharon del asesinato. El primer reporte policial refiere que la niña fue estrangulada y tenía un par de horas de haber muerto, el inmueble permaneció custodiado por policías del municipio.
Chayito fue de las primeras en enterarse, vive casi frente a la vivienda, le tomó cariño a la pequeña que la visitaba cuando podía, siempre la observó con mala alimentación y heridas, incluso le reclamaba a la abuela que no la mandara a la escuela, estaba prácticamente en cautiverio.
Los vecinos decidieron organizar el sepelio, el martes la recibieron con música, ayer a mediodía cuatro mujeres jóvenes cargaron el ataúd hasta la capilla y después de la misa depositaron los restos en el panteón local, asistieron pocos familiares.
Los niños y padres de familias que la conocieron aseguran que dejó de asistir a la primaria después que la maestra la reportara al observar que la pequeña iba violentada, el DIF, dicen, solo la notificó de las denuncias que realizaron pero no hicieron nada para rescatarla, reprocharon.