México

Efectivo control de la GN para frenar a migrantes

CIUDAD DE MEXICO, 18 de enero.- El despliegue de cientos de efectivos de la Guardia Nacional (GN) logró persuadir este sábado a los poco más de tres mil 500 migrantes que esta mañana intentaron entrar por la fuerza a través de los cruces fronterizos de Suchiate, en Chiapas, y El Ceibo, en Tabasco.

Durante alrededor de una hora, en los dos cruces cientos de migrantes se juntaron en las rejas que dividen ambas naciones y empujaron, lanzaron objetos e intentaron tirar las rejas, como lo habían hecho en caravanas anteriores.

Sin embargo, el fuerte despliegue de elementos de la Guardia Nacional los controló e impidieron que lograran entrar de manera masiva.

Agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) les explicaron que solo de manera ordenada se les permitiría el paso a quienes quisieran entrar a México cumpliendo los requisitos marcados por las leyes mexicanas.

Y es que desde el viernes, cientos de integrantes de la Guardia Nacional arribaron a la frontera sur y se han desplegado en las instalaciones migratorias de los cruces formales y en otras zonas donde los migrantes pudieran intentar pasar de manera no regulada.

El despliegue fue supervisado por el titular del INM, Francisco Garduño, quien advirtió que las autoridades tienen la capacidad para atender la seguridad de la frontera sur.

“Hay capacidad para aplicar la ley. Es una migración que será como establece la ley”, dijo.

Insistió que únicamente podrán entrar quienes cumplan los requisitos legales demandados por México.

Autoridades mexicanas permitieron el “ingreso controlado” de la caravana migrante, pues de acuerdo con el general de la Guardia Nacional, Vicente Hernández, no se trata de un acto ilegal transitar o ingresar al país, por lo que se está atendiendo a los centroamericanos. El ingreso se consintió para que se registraran a los programas sociales y a bolsa de trabajo disponible.

“Estamos dando una recepción humanitaria de mucha atención, ese es el plan, darles opciones laborales, darles la opción de regresar a su país y allá se les va a dar empleo, hay muchas oportunidades para estas personas.

“Lo que se está haciendo únicamente es un ingreso controlado, no es un delito estar o cruzar México, pero lo que nos dicen las leyes migratorias señalan las formas de hacerlo”, comentó el comandante del centro de coordinación de operaciones en Suchiate, Chiapas.

Indicó que en la zona de El Ceibo hay otras 200 personas intentando cruzar hacia territorio mexicano.

Instaron a migrantes centroamericanos a guardar “orden y respeto”, asegurándoles que “hay oportunidades para todos” los que ingresen al país siguiendo el procedimiento regular.

Más temprano, miembros de la llamada caravana 2020, formada por miles de migrantes en su mayoría hondureños y salvadoreños, forcejearon brevemente con efectivos de la Guardia Nacional que resguardan el puente internacional Rodolfo Robles, uno de los pasos formales entre México y Guatemala, pero fueron finalmente contenidos.

El General Vicente Hernández, coordinador de operaciones de la Guardia Nacional en el río Suchiate, frontera natural entre ambos países, se acercó a la reja divisoria sobre el puente fronterizo para dirigirse a los migrantes y asegurarles que habrá una “recepción humanitaria” mediante un “ingreso controlado”.

“Con orden y respeto todos seremos atendidos. Hay oportunidades para todos.

Entendemos la situación, ustedes son nuestros hermanos de Honduras, El Salvador, Guatemala”, dijo Hernández a los centroamericanos que respondieron atentos y con aplausos al mensaje del oficial.

Algunos aceptaron de inmediato las condiciones de las autoridades y comenzaron a ingresar al recinto migratorio del lugar en grupos de 20 personas.

“Que nos den una oportunidad”

Tras la tensión matinal, pocas personas se mantuvieron aferradas a la reja, mientras que el resto se dispersó del lado guatemalteco, en la ciudad de Tecún Umán. Algunos bajaron a refrescarse en las aguas del Suchiate y otros prefirieron descansar en un albergue de la localidad.

“Le pido a las autoridades mexicanas que por favor nos den una oportunidad para poder emprender un buen trabajo y llegar a superarnos”, dijo a la AFP.

Edith Maya, de 40 años, quien salió desde Puerto Cortés, al norte de Honduras, con sus hijos de 9 y 13 años. Maya espera continuar hasta Estados Unidos o bien encontrar empleo en México.

El general Hernández informó que, ante la llegada de la caravana, se reforzó la vigilancia en toda la frontera sur, sin precisar el número de agentes desplegados.

Detalló que en El Ceibo, otra localidad fronteriza, unas 200 personas también intentaron ingresar irregularmente pero se les contuvo y, aunque se les invitó a registrarse, optaron por regresar al lado guatemalteco, donde se estima que hay un millar de migrantes.

Personal de Migración mexicano colocó cartulinas en la zona fronteriza con información del Programa de Emergencia Social puesto en marcha por el gobierno para atender el éxodo.

Los anuncios señalan que dos programas de empleo serán puestos en marcha en ocho departamentos de Honduras y en 14 departamentos de El Salvador.

Miles esperan cruzar

La mayoría de los migrantes que busca cruzar a Ciudad Hidalgo partió la noche del martes desde la hondureña San Pedro Sula, llegando este sábado por la mañana al puente fronterizo.

Edgardo Mejía, un agricultor de 34 años, llegó a Tecún Umán tras largas jornadas en las que, asegura, caminó ocho horas seguidas. “El país económicamente está quebrado, no hay trabajo” en Honduras, lamentó.

En este punto de la frontera, se estima que unas 3.000 personas llegaron con la caravana 2020, de acuerdo con autoridades y medios locales. El viernes, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ofreció 4.000 empleos a los migrantes de ese contingente.

La Guardia Nacional detuvo el jueves a unos 38 migrantes haitianos que intentaban entrar a México por el río. Desde el año pasado, México desplegó a miles de agentes y soldados para contener la masiva migración hacia Estados Unidos, una decisión para aliviar presiones de ese país que ha sido criticada por organizaciones civiles.

Human Rights Watch acusó el martes en su informe anual que México infringe los derechos humanos de los migrantes que transitan por su territorio.