El Dr. Jesús Torres Flores, integrante de la Sociedad Mexicana de Virología, expuso que, aunque se trate de espacios abiertos, hay un importante riesgo de contagio de COVID-19 porque hay aglomeraciones y no se respeta la sana distancia y, sobre todo, con el creciente número de casos que se está dando en algunas entidades. "Entre más gente hay en determinado lugar el riesgo aumenta", expuso.
El especialista comentó que, al parecer, en muchos casos se han relajado las medidas de prevención y esto ha llevado a las personas a no seguir las medidas preventivas, por lo que con la llegada del mes de diciembre también se han observado aglomeraciones en mercados, plazas y otros lugares. Dijo que hay tres variables que fomentan el contagio de coronavirus: los lugares cerrados, con poca ventilación y las aglomeraciones, sobre todo si no se respete la sana distancia.
El especialista habló también del regreso a clases que ya se proyecta por parte del Gobierno federal para el mes de enero, para aquellas entidades que estén en color verde del semáforo epidemiológico. En este caso, dijo que desde su punto de vista es muy prematuro pensar que los menores vuelvan a las aulas tan pronto.
Es muy pronto para que los niños regresen a clases
“En el caso de las escuelas no hay muchos datos con respecto a la COVID-19. Alguna información sugiere que los menores no desarrollan cuadros tan graves y no contagian como los adultos, lo que no quiere decir que no se enfermen, peor en general no se enferman tanto y no tienen tanta capacidad de contagiarse con el virus. Esto puede ser por una inmunidad existente en ellos contra otros virus”.
“Pero en lo personal creo que es muy pronto pensar en el regreso a clases, porque la decisión debe estar basada en el comportamiento de la pandemia, en el número de contagios, porque puede ser que de regresar haya un brote general que eche para atrás lo avanzado”, dijo.
Comentó que se había hablado de un regreso a clases hasta después del primer semestre del 2021, lo que sería más viable porque también coincide con el esquema de vacunación que ya se ha presentado.
Hay que evitar las aglomeraciones para no contagiarse
Sobre la aglomeración que se ha observado en diferentes estados, en centros de comercio, plazas públicas y demás, dijo que de pronto las personas se han relajado, lo cual es muy riesgoso. Consideró que no es el mejor momento para relajar las medidas porque esto, aunado a la concentración de personas en un mismo lugar, puede disparar los contagios de COVID-19.
“Entre más gente hay en un lugar el riesgo aumenta. Si hay más aglomeraciones y se relajan medidas y estamos en el momento menos indicado, el riesgo es grande. Por ello hay que tratar de salir a lugares concurridos, a menos que sea indispensable”.
“Si es indispensable salir a ciertos lugares hay que usar el cubrebocas y usarlo bien, cubriendo nariz y boca. Si todo mundo usa el cubrebocas se reduce el riesgo, pero lo tienen que usar todos y a menudo no sucede así”, comentó.
Explicó que si bien hay menos riesgo de contagio en lugares abiertos no es así cuando hay aglomeraciones y además no se guarda la sana distancia, no se usa correctamente el cubrebocas y en general las medidas se han relajado.
“Siempre hay que mantener la distancia y aunque se trate de un lugar al aire libre, así como hay que usar bien el cubrebocas. A veces el uso puede ser incómodo, pero más vale 20 o 30 minutos de incomodidad que pasar 3 o 4 semanas en un hospital y con la probabilidad de ser entubado, con el riesgo que conlleva también adquirir otras infecciones hospitalarias en el nosocomio”, dijo.
El virólogo señaló que en algunas entidades que están en color verde, como ha sucedido en Campeche, se ha visto una mayor relajación de las medidas, lo que dijo es entendible hasta cierto punto.
“Pero el problema de relajar las medidas es que puede subir los números de contagios, como está sucediendo en la Ciudad de México donde se habla ya de que está siendo sobrepasado el sistema de salud”.
“Los contagios van al alza y no hay que relajar las medidas porque volver al semáforo rojo nos llevaría a cierres totales. Por eso la recomendación de las autoridades de que las fiestas de diciembre sean sólo con la familia nuclear”, comentó.
Consideró que, en México, hasta cierto punto, se había estado aplanando la curva de contagios, lo que se logró durante muchos meses. En general, dijo, en el país no se han dado cierres totales como en otros países que las personas no podían salir ni a trabajar.
“Pero si las cosas llegan a niveles preocupantes, con los hospitales que se saturen vendrían medidas restrictivas más severas y cierres totales y, entonces, la gente tendría que dejar de salir, toda”, dijo.
Reiteró en este sentido que la responsabilidad de que no se disparen los contagios está en la propia gente porque ya pasó en Europa, en Estados Unidos, donde se relajó la población y se dispararon los contagios y esto podría también suceder en México. “Hay que acatar las medidas. El fenómeno no es inmediato y por ello el llamado ahora a no relajar las medidas, para que en unas semanas se puedan reducir los números y no lo contrario. Y es preferible hacerlo ahora, no relajar, para no pasar la navidad en un hospital”, comentó.
CI