CIUDAD DE MEXICO, 11 de febrero (EFE).- Las políticas migratorias de Estados Unidos agravan la crisis humanitaria de la región al exponer a los migrantes a la violencia, a menudo obligándolos a permanecer varados en lugares peligrosos de México, denunció este martes la ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) en la presentación de su informe “Sin salida”.
“A sus ciudadanos (Estados Unidos) les recomienda no ir bajo ningún concepto a Tamaulipas, a los funcionarios les prohíbe ir, y a su vez está agarrando a migrantes y familias completas y los está enviando allí”, ejemplificó el coordinador general de MSF en México, Sergio Martín.
Martín aseguró que los migrantes centroamericanos “son perseguidos por el hecho de serlo” y que son un colectivo especialmente vulnerable, lo que los expone todavía más en un escenario violento como el que atraviesan en su ciclo de migración.
La asociación reveló que un 61.9 por ciento de los migrantes que entrevistaron en 2018 estuvieron expuestos a alguna situación de violencia en sus países de origen que motivó su partida, y cerca de la mitad (42.5 %) de los entrevistados aseguró haber sufrido la muerte violenta de un familiar en los dos años anteriores. “Estamos hablando de personas que muchas veces han sido desplazadas en una primera instancia en sus países de origen. Personas que huyen del campo hacia las ciudades y lo que se encuentran es un ambiente muy violento”, explicó Martín en declaraciones a Efe.
El coordinador de MSF calificó de “imposible” vivir con normalidad en esas condiciones en sus países, por la exposición a “hijos reclutados para las maras, extorsión, violación, violencia, asesinatos”, un panorama que les obliga a desplazarse de nuevo.
Vulnerables
Sin embargo, el porvenir al lanzarse a la ruta migrante no es alentador, ya que los desplazados “muchas veces no son dueños de su voluntad” y “acaban siendo llevados” a los puntos más peligrosos de México. “Los migrantes son objetivo en México, son perseguidos en México. Son personas más vulnerables y con menos derechos y por tanto más fáciles de secuestrar, extorsionar… Hay más impunidad”, sostuvo.
Las cifras lo respaldan: durante su paso por México, un 57 % de los 480 entrevistados por MSF para este informe dijo que estuvo expuesto a algún tipo de violencia y el 78 % de las 3,695 personas atendidas en sus consultas de salud mental en 2018 y 2019 presentaban “algún factor desencadenante relacionado con la exposición a la violencia”.