MOSCU, Rusia, 24 de marzo.- El Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés) reportó un sismo de magnitud 7.5 grados en la escala de Richter en la región del Lejano Oriente de Rusia, con epicentro en las Islas Kuriles.
El poderoso terremoto de magnitud 7.8 causó grandes temblores en toda la región.
Asimismo, se emitió una alerta de tsunami para Hawaii, a unos 5 mil 600 kilómetros de distancia.
Ante ello, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) informó que de confirmarse el tsunami, éste podría afectar a Hawaii alrededor de seis horas después, alcanzado también el sur de California, Estados Unidos dentro de nueve horas. De acuerdo con el reporte de la USGS, el sismo fue percibido en toda la región ya que golpeó a una profundidad de 57 kilómetros; sin embargo, no se han reportado daños o víctimas hasta el momento.
Golpeando en el Océano Pacífico a unos 219 kilómetros (136 millas) al sureste de Severo-Kuril’sk, un pequeño pueblo con una población de poco más de 2,500 habitantes en el extremo norte de las Islas Kuriles, el terremoto fue inicialmente reportado como de una magnitud de 7.8, pero pronto se redujo a un 7.5.
Los aterrorizados habitantes locales acudieron a los medios de comunicación social para ofrecer relatos de primera mano sobre el evento sísmico que ha enviado ondas a toda la región.
“Nunca he sentido algo así… Salimos corriendo de la casa, mientras que normalmente no hacemos nada”, un residente tweeteó.
“Estaba muy asustada”, añadió.
Otro testigo confesó que nunca ha experimentado nada de esa magnitud durante los 15 años que lleva viviendo en la región propensa a los terremotos.
“Me asusté mucho por primera vez. Un marco de fotos y un jarrón con flores artificiales cayeron al suelo”.
La región no es ajena a los terremotos, con un temblor de magnitud 4.9 que azotó la Bahía de Kronotsky en la península rusa de Kamchatka a finales del mes pasado, a unos 300 kilómetros al norte de Severo-Kuril’sk.
El arco tectónico de Kuril se extiende aproximadamente 2,100 km desde Hokkaido, Japón, a lo largo de las Islas Kuriles y la costa del Pacífico de la Península de Kamchatka.