México

CIUDAD DE MEXICO, 13 de abril (EFE/EL UNIVERSAL).- El Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, consideró este lunes que a su país le fue “requetebién” y recibió un “trato especial” en la cumbre de la alianza petrolera OPEP+, tras lograr solamente reducir su producción en 100 mil barriles diarios.

“Les adelanto que nos fue muy bien, requetebién. México tuvo un trato especial, fue respetado por el concierto de estas naciones productoras de petróleo. Fue algo excepcional”, dijo el Mandatario en la conferencia matutina desde Palacio Nacional.

Informó que será el miércoles cuando la Secretaria de Energía, Rocío Nahle, y el director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Octavio Romero, darán más detalles sobre el papel de México en este encuentro telemático.

Según López Obrador, el acuerdo fue algo “nunca visto”. Pero esta negociación la “vamos a tratar el miércoles, les vamos a dar todos los detalles”, subrayó el Presidente.

El Presidente señaló que ahora con la crisis de los precios del petróleo se entiende mejor, el por qué necesitamos construir la nueva refinería en Dos Bocas, Tabasco y el por qué fue un error, el no hacer una nueva refinería en 40 años.

“No es lo mismo extraer petróleo crudo y venderlo; que extraer petróleo crudo, procesarlo y convertirlo en gasolinas y en otros productos petroquímicos, eso se les olvidó en el pasado. Por eso ahora todo el esfuerzo es el darle valor agregado a nuestra materia prima, la rehabilitación de las refinerías y la construcción de la nueva refinería, para no tener que comprar las gasolinas como lo tenemos que hacer desgraciadamente en la actualidad, en un 60 % de lo que consumimos”, dijo el Mandatario.

La alianza petrolera OPEP acordó este domingo recortar 9.7 millones de barriles diarios (mbd) durante los meses de mayo y junio, y si a eso se suma el cierre de grifos de otros importantes productores, el volumen que se retire del mercado podría rondar los 20 mbd, el 20 por ciento de la demanda mundial.

El acuerdo definitivo se logró al salvarse el escollo de México, que se negó a recortar los 400 mil barriles diarios que se le demandaba en un principio y ahora solo tendrá que retirar 100 mil.

Estados Unidos asumirá los 300 mil barriles diarios que su vecino meridional deja de recortar en la versión definitiva del pacto.

La ministra de Energía mexicana, Rocío Nahle, se convirtió en una de las protagonistas de la cumbre pese a que la producción de México roza apenas los 1.78 millones de barriles diarios.

Su firme postura frente a Arabia Saudí recibió grandes alabanzas de quienes consideran que México se beneficiará del freno de la caída del precio del crudo sin tener que hacer un gran esfuerzo de recorte en su producción.

No obstante, el acuerdo al que se ha llegado con el Gobierno de Estados Unidos también ha despertado suspicacias sobre cómo Donald Trump pretende cobrarse dicha ayuda.