“No me gusta el modito” del BID y empresarios, manifestó el Presidente López Obrador. “No me gusta que quieran imponer planes… Ahora el Gobierno representa a todos”
CIUDAD DE MEXICO, 27 de abril (SinEmbargo / NTX).– El Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró esta mañana que no le gustó “mucho el modito” en que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Consejo Mexicano de Negocios (CMN) se pusieron de acuerdo para tratar de imponer a su Gobierno la entrega de créditos por hasta 12 mil millones de dólares a 30 mil micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) afectadas por la crisis del coronavirus en el país.
“No me gusta mucho el modito de que se pongan de acuerdo y quieren imponernos sus planes. Ya no es como antes, antes el poder económico y el poder político eran lo mismo, se alimentaban, se nutrían mutuamente. Ahora ya no, ahora el Gobierno representa a todos. Hay una separación entre poder económico y poder político. ¿Cómo que se hace un acuerdo y que Hacienda lo avale? ¿Qué estamos aquí de florero, de adorno? Entonces ver todo esto es protegernos como nación, además no dar ninguna oportunidad a la corrupción”, dijo.
En su conferencia de prensa matutina, el Mandatario afirmó que no puede dar su aval para los créditos propuestos, “porque no queremos endeudar al país y queremos rescatar primero a los más necesitados”.
Aseguró que no permitirá que se utilicen recursos de la hacienda pública para propiciar el rescate de grandes empresarios que buscan en la pandemia del coronavirus, recursos extraordinarios con cargo al erario.
“Nada de que empiecen a rescatar empresas quebradas y que suceda lo que pasó: bancos quebrados, banqueros ricos. No, no se puede socializar las pérdidas y privatizar las ganancias. No me opongo si no es a costa del presupuesto federal; pero si es a cargo del presupuesto, no lo acepto. Si no es con el aval del Gobierno, no hay problema, bienvenida”, aclaró.
López Obrador consideró que el empresariado ha actuado con prepotencia al tratar de imponer sus planes económicos al gobierno y tratar de revivir las prácticas de antiguos regímenes donde el poder económico se podía imponer sobre las decisiones del Ejecutivo federal.
En ese sentido, el Mandatario federal descartó que este comentario sea una nueva escalada en sus diferencias con el empresariado del país, no obstante, alertó que la aplicación de las fórmulas económicas del pasado, donde se debía privilegiar el rescate de los grandes, sólo llevó al país a la ruina.
Asimismo, se cuestionó cuál es la garantía de estos créditos. “Las reservas, no. Las reservas son de la nación, del pueblo de México”, sostuvo. Por otra parte, señaló que va a apoyar a los empresarios, “pero también a los indígenas, a los campesinos, a los tianguistas, a los taxistas, a los estudiantes. El Gobierno ya no es un comité al servicio de una minoría”.
AMLO vigilará apoyos anunciados por Banxico
El Mandatario federal dijo hoy que se debe tener mucho cuidado de que el Banco de México esté destinando recursos para las micro, pequeñas y medianas empresas, ya que pueden ser ocupados para otros “rescates”.
El jefe del Ejecutivo señaló que no es deseable que los recursos de la nación, administrados por el Banxico, sean destinados al rescate de empresas que antes de la pandemia del COVID-19 ya tenían problemas financieros.
“Habría que, ahora que el Banco de México ha decidió destinar unos fondos a las pymes, hay que tener mucho cuidado que en efecto sea a la pequeña y mediana empresa, no vaya a hacer para rescatar a empresas que antes del coronavirus ya tenían problemas financieros, mucho cuidado”, advirtió el López Obrador
“Sus reservas no son del Banco de México ni siquiera son del gobierno, son de la nación y así todos los créditos hay que cuidarlos porque si no se cargan a la Hacienda pública”, señaló tras reiterar su respeto a la autonomía de la institución.
La semana pasada, el Banco de México anunció medidas como el recorte al 6 por ciento de la tasa de interés y la inyección de 750 millones de pesos a los bancos para que sean canalizados a los bancos y estos puedan llegar a personas y empresas.
En ese sentido, el presidente de la República descartó que su gobierno vaya al rescate de las grandes corporaciones en el contexto de la pandemia del COVID-19, como sucedió en el pasado, con el Fobaproa.
“No vamos a ceder aunque se enojen, se van a quedar esperando”, advirtió.
Revisaremos situación e Afores
El Presidente informó hoy que, una vez superada la emergencia por COVID-19, se revisará lo que se hizo en el periodo neoliberal de privatizar los ahorros y las pensiones de los trabajadores.
“Hay que buscar una solución porque si no se actúa, los trabajadores, sobre todo los que se van a empezar a jubilar a partir del 2024, van a recibir menos de lo que ahorraron. Eso es un tema preocupante; por ejemplo, eso requiere de un rescate.
Respecto a que a partir de la contingencia los bancos han permitido a los trabajadores sacar dinero de su Afore, indicó que es decisión de cada trabajador analizar si le conviene o no y ver su situación futura también, el cual representa un problema de origen para perjudicar a los trabajadores que se tiene también que revisar.
“Vamos a ver lo de los Afores, es un compromiso que tengo, que no porque a mí ya no me a afectar, o sea, ya no voy a estar en el gobierno, lo voy a dejar eso, tenemos que buscar una salida más adelante, porque esto precisamente lo inició Zedillo, esto de los Afores; entonces, va a empezar a afectar a partir de 2024 hacia adelante”, concluyó.
México y EE. UU. trabajan para reactivar la industria automotriz
López Obrador confirmó este lunes su voluntad de “reactivar pronto” la industria automotriz, en un primer paso para aprovechar la entrada en vigor del tratado comercial con Estados Unidos y Canadá (T-MEC) el 1 de julio.
“Cuando hablamos de la industria automotriz en México, se generan 1 millón de empleos. Eso se va a reactivar pronto, y son empresas matrices, pero hay muchísimas empresas alrededor de esas”, explicó en su conferencia matutina.
“Estamos en comunicación con el Gobierno de Estados Unidos porque sí son cadenas productivas y no podrían abrir sus plantas si no se abre en México algunas plantas que producen insumos, partes”, concedió el mandatario mexicano, quien insistió en que ambos Gobiernos mantienen un trabajo “conjunto”.
Sin embargo, López Obrador recordó que su vecino del norte “desgraciadamente está padeciendo la pandemia” y que “todavía no puede abrir”, por lo que todo está en una fase de valoración.
El Presidente confió en que antes del 1 de julio pueda entrar en vigor el TMEC entre México, Estados Unidos y Canadá.