En el corazón de las tradiciones ancestrales mexicanas, el 19 de diciembre cobra un significado especial para quienes buscan conectar con las raíces prehispánicas de México. Aunque la Navidad tradicional, influenciada por el cristianismo europeo, se celebra el 24 y 25 de diciembre, existe una festividad conocida como la Navidad Mexica o Tlaxochimaco, que se remonta a las creencias y costumbres del antiguo imperio mexica.
Origen y significado de la celebración
La "Navidad Mexica" coincide con el ciclo del Panquetzaliztli, una de las veintenas del calendario mexica dedicada al dios Huitzilopochtli, deidad de la guerra, el sol y el pueblo mexica. Durante esta celebración, que en tiempos prehispánicos iniciaba entre el 17 y 19 de diciembre, los mexicas honraban el nacimiento simbólico de Huitzilopochtli, quien representaba la luz del sol naciente en la lucha contra la oscuridad.
Según los códices antiguos y registros de los frailes cronistas, el nacimiento de Huitzilopochtli era motivo de grandes festejos en la antigua Tenochtitlán. La llegada del solsticio de invierno representaba el momento crucial en que el dios sol comenzaba a imponerse sobre las tinieblas, un paralelo impresionante con las tradiciones navideñas cristianas, donde se celebra el nacimiento de Cristo, la "luz del mundo".
Celebraciones ancestrales
Las festividades del Panquetzaliztli se caracterizaban por rituales, ofrendas florales y danzas ceremoniales. Se elaboraban tzoalli, figuras de masa de amaranto y miel, que simbolizaban a Huitzilopochtli, las cuales se repartían entre los participantes en una especie de comunín ritual.
Los templos y hogares se decoraban con banderas de papel amate y guirnaldas de flores, especialmente de cempasúchil y otras plantas sagradas. Además, las familias se reunían para compartir alimentos como el maíz, frijol, calabaza y chocolate caliente, en una atmósfera de alegría y esperanza por el ciclo que se renovaba.
Un reencuentro con las raíces
Hoy en día, diversas comunidades, académicos y defensores de la cultura ancestral han comenzado a recuperar y resignificar esta celebración. El 19 de diciembre se presenta como una fecha simbólica para recordar la Navidad Mexica, un tiempo para reconectar con los ciclos naturales, la espiritualidad prehispánica y la historia olvidada de nuestros pueblos originarios.
En lugares como Templo Mayor de la Ciudad de México, grupos culturales y organizaciones realizan ceremonias y danzas en honor a Huitzilopochtli, reviviendo una tradición que celebra la renovación, la luz y la vida.
Una Navidad distinta, pero significativa
La Navidad Mexica no pretende competir con la festividad cristiana; más bien, ofrece una mirada distinta, profundamente arraigada en la cosmovisión mesoamericana. Es una oportunidad para reconocer y celebrar la diversidad cultural del país, recordando que antes de la llegada de los conquistadores, ya existían celebraciones que daban sentido al paso del tiempo y a los ciclos de la naturaleza.