La Fiscalía General del Estado de Guerrero, en Chilpancingo, amaneció este martes bajo la vigilancia de aproximadamente 300 miembros de la Guardia Nacional.
La presencia de los agentes, reportada por medios locales, tiene como propósito prevenir una eventual irrupción de estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, quienes han expresado su inconformidad con recientes nombramientos en la administración pública y el asesinato de su compañero Yanqui Kothan Gómez, ocurrido hace un mes.
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Equipados con máscaras antigás, escudos y gas lacrimógeno, los guardias se posicionaron alrededor del edificio ubicado en la colonia El Potrerito, preparados para el posible arribo de los normalistas.
Esta acción se produce un día después de que los estudiantes de Ayotzinapa vandalizaran las oficinas del Gobierno de Guerrero, también situadas en Chilpancingo, donde incendiaron diez vehículos.
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Los actos de protesta del lunes se centraron en el edificio ‘Montaña’, que alberga diversas dependencias estatales como las Secretarías de Educación y de Planeación, así como la Consejería Jurídica y la oficina de Comunicación Social.
Durante el incidente, los estudiantes utilizaron petardos y bombas caseras contra las instalaciones, causando un incendio parcial.
En su rápida incursión, los manifestantes quemaron varios vehículos en el estacionamiento del complejo gubernamental, entre ellos unidades oficiales y privadas, antes de retirarse hacia las instalaciones de su escuela en Tixtla.
Según el informe preliminar del gobierno estatal, la protesta resultó en 19 vehículos dañados, incluyendo nueve incendios.
La tensión en Guerrero se intensifica al cumplirse un mes del asesinato de Yanqui Kothan Gómez, estudiante de Ayotzinapa, a manos de policías estatales.
Compañeros y familiares del joven realizaron un mitin en el lugar de su muerte para exigir justicia, marcando un momento de alta emotividad en la lucha por la verdad y la reparación.
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