
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, se deslindó de la controversia generada en torno al viaje del senador Gerardo Fernández Noroña, quien fue captado viajando en primera clase rumbo a Francia para participar en una reunión del Parlamento Europeo.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum señaló que será el propio legislador quien debe explicar públicamente su decisión.
“Respeto mucho a Gerardo Fernández y pues cada quien que decida. Malo sería si hubiera usado recursos que no son parte de su ingreso”, aclaró.
La mandataria aprovechó la ocasión para reiterar su compromiso con la austeridad republicana, asegurando que, en sus múltiples viajes, siempre viaja en clase turista.

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“Aquí está Paulina (Luna, su coordinadora de comunicación) de testigo. Muchas veces me ofrecen pasar a primera clase y yo prefiero quedarme donde estoy. Imagínense…”, comentó con humor.
Sheinbaum también ironizó sobre el argumento físico que algunos han dado para justificar el viaje de Noroña en primera clase. “Yo mido 1.62, él mide 1.84 o 1.90, así que a mí me caben bien las piernas. Pero en fin, no me voy a meter en la polémica”, zanjó.
La controversia ha encendido el debate en redes sociales, ya que Fernández Noroña es uno de los principales defensores de la austeridad, y su viaje ha sido interpretado por algunos sectores como una contradicción con sus principios.
Hasta el momento, el senador no ha emitido una declaración pública detallada sobre el tema. Mientras tanto, Sheinbaum mantiene su postura de mantenerse al margen y dejar que cada funcionario responda por sus propias decisiones.
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