Tras romperse el diálogo, ejidatarios de Pejelagarto se negaron a firmar el convenio de ocupación previa ante el descontento por el evalúo y monto pagado por las afectaciones de sus tierras de uso común por el paso del Tren Maya, por lo que tampoco acordaron con el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) un nuevo recorrido del tramo en cuestión, ya que indignados señalaron de que a pesar de que la extensión de la parte afectada es la misma distancia en relación con el ejido Miguel Alemán y Luna, solamente reciben un pago extra de un millón 500 mil pesos, mientras que en los ejidos antes señalados les entregaron cerca de 16 millones y 28 millones, adicionales al primer pago.
Durante la asamblea efectuada en la cancha de usos múltiples de Pejelagarto, se contó con la presencia de Absalón Herrera, Claudia Gonzáles, representantes de oficinas centrales de Fonatur; Cristofer Medina, licitador de la Procuraduría Agraria del estado de Tabasco, entre otros.
Es preciso destacar que durante la asamblea se calentaron los ánimos de los ejidatarios, luego que Claudia González en su intervención diera a conocer la propuesta de Fonatur-Tren Maya, en la cual ofrecía un pago extra de un millón 500 mil pesos a los ejidatarios, el cual refutaron rotundamente.
Aunque en su momento la representante de oficinas centrales dio a conocer el resultado de monto y el evalúo realizado, así como el pago de cada hectárea que fue de 14 pesos por metro cuadrado y 140 mil pesos por hectárea, en el nivel máximo considerado por el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales (Indabin), al tratar de convencer a los ejidatarios de que era el pago justo, esto enojó a los aludidos.
Al respecto, ejidatarios como Roberto Cruz San Miguel, Fernando Ramírez Félix, Germán Cyrz San Miguel, entre otros, coincidieron que lo único que querían era un pago justo y semejante a lo considerado en los otros dos ejidos, pues señalaron que no es posible que, a pesar de la misma distancia en la parte afectada, Pejelagarto recibirá menos recursos.
Mentiras
Los inconformes señalaron que desde el inicio del proyecto las negociaciones, las firmas de convenios y los pagos estuvieron “amafiados” en contubernio con Barrientos y Asociados y Fonatur, pues actuaron con alevosía y ventaja.
Dijeron que si desde un principio les hubieran explicado de esta manera paso por paso y detalle a detalle, sería otra situación, pero en cambio “el recurso que nos quieren dar no es suficiente”, dijeron.
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GH