Max Lesnik
Basta con repasar los medios de comunicación que responden a los intereses del “capitalismo salvaje” para saber a quién le toca en estos momentos recibir las andanadas de grueso calibre lanzadas contra los gobernantes o ex gobernantes de países de América Latina que defienden a capa y espada los intereses de los sufridos pueblos del Nuevo Continente.
Ahora le ha tocado ser el blanco de esos ataques al presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, como antes lo habían sido Rafael Correa, de Ecuador; Cristina Fernández, de Argentina; Nicolás Maduro, de Venezuela; y Evo Morales, de Bolivia, todos ellos en la mira de la extrema derecha de América Latina siguiendo las pautas trazadas desde Washington, que es la capital del imperio mundial norteamericano.
Alguien me dijo un vez –¿sería Fidel Castro?– que la gran batalla del imperialismo en América Latina no sería librada contra Cuba, bastión de la rebeldía revolucionaria, sino más bien contra México cuando en ese país surgiera de las entrañas de ese pueblo un gobernante digno heredero de la Revolución Mexicana.
Si ese es el caso, eso explica la razón de los ataques constantes de los medios de comunicación al servicio del “capitalismo salvaje”, tanto de México como del resto del mundo contra el Presidente López Obrador. Quieren crear las condiciones previas necesarias para un Golpe de Estado o el asesinato del actual mandatario mexicano.
México es la clave donde se va a decidir el destino del continente americano. “Alea Jacta est”. La suerte está echada.